Ante las constantes muertes por ahogamiento de migrantes en lo que va del año, incluida una mujer embarazada, existe la posibilidad de que se coloquen cercas con alambre de púas en los márgenes del Río Bravo, en Piedras Negras, no para frenar la migración sino para salvar más vidas.
Lo anterior sin contar todas las muertes que no están registradas y que se han presentado a lo largo del Río Bravo, sin que nadie se dé cuenta.
Así lo mencionó la diputada María Esperanza Chapa García, en relación con que Texas entregará al Estado el alambre para estas cercas, pero que lo hará en reciprocidad por el gran trabajo que en materia de seguridad ha realizado el gobernador Miguel Ángel Riquelme en las fronteras de Piedras Negras y Ciudad Acuña, con Eagle Pass y Del Río.
Si bien desconoció que tipo de material se usara para ponerlo en las márgenes del Río Bravo, subrayó categórica que si se hará será para proteger más vidas y no sigan muriendo más migrantes ahogados, para que todos esperen su turno y crucen por la aduana sin exponer sus vidas.
“Hemos visto a los migrantes que no le temen a nada, como al fuego, al agua y ni a los cocodrilos en el Río, por eso se tienen que tomar medidas urgentes ante la falta de apoyo de la Federación”, abundó la coordinadora de Asuntos Fronterizos del Congreso del Estado.
Afirmó que la situación que se vive con los migrantes, en este caso en Piedras Negras, es alarmante porque ahora provocaron un incendio en un sitio donde se les albergó, donde el Gobierno del Estado y el Municipio hacen lo que les corresponde.
“Esta es una situación crítica y grave, donde el Instituto Nacional de Migración (INM) debe tener las medidas necesarias, porque aparte ni cuentan con las instalaciones adecuadas y la capacidad suficiente”, subrayó la legisladora.
“Aquí se debe de tomar una solución rápida porque el calor en la Región Norte es sofocante y las necesidades de ellos son muchas, por eso no se les puede tener metidos y sometidos”, agregó.
También expuso que lo sucedido en el albergue que quisieron quemar para fugarse alrededor de 300 migrantes, en Piedras Negras, “es una campana fuerte para que el Gobierno Federal retome el asunto, porque el Gobierno del Estado no debe de estar pagando tanto por los repatriados enviados a sus lugares de origen en camión o en avión”.
Publicado originalmente en El Sol de La Laguna
