Para prevenir y controlar el tránsito ilegal de combustible en la capital, el alcalde Marco Antonio Bonilla mencionó que en recientes mesas de seguridad que se realizaron con la presencia de autoridades de Pemex, se habló de instalar medidores de presión a lo largo del ducto de hidrocarburos que pasa por la ciudad de Chihuahua para identificar tomas ilegales.
Bonilla Mendoza informó que actualmente hay células de la Secretaría de la Defensa Nacional y la Guardia Nacional en coordinación con Petróleos Mexicanos (Pemex) trabajando en temas de vigilancia en los diferentes tramos de los ductos, debido a los crecientes hechos delictivos por el robo de combustible de los ductos de Pemex.
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Asimismo, el director de la DSPM, Julio César Salas, afirmó que son 170 elementos de Sedena los que se encargan del monitoreo de las brechas y los ductos de Pemex, con la intención de disminuir la incidencia de huachicoleo.
El objetivo de instalar los medidores de presión, es que estos permitirán saber dónde se baja la presión del tránsito de combustible en los ductos e identificar las tomas ilegales, sin la necesidad de constante vigilancia, evitando que se siga realizando esta actividad delictiva que resulta también altamente peligrosa para los ciudadanos que lo realizan.
“Pero esto ya es responsabilidad total del Gobierno Federal y de Petróleos Mexicanos, nosotros vamos a seguir como siempre apoyándolos en lo que nos soliciten sin dejar de poner el dedo en la llaga”, expresó el alcalde Bonilla.
Asimismo, por parte del 23 batallón de Infantería la V Zona Militar, el Ejército, la Policía Estatal y Municipal, realizan binomios en diferentes zonas de la ciudad para prevenir de mejor manera la comisión de dicho delito, hasta que se recobre la tranquilidad y la paz en el municipio.
Por otro lado, según indicó Santiago de la Peña, secretario General de Gobierno, el pasado 6 de febrero, en el presente año se han detectado más de 20 tomas clandestinas para la extracción de hidrocarburos, refiriendo que esta actividad ha ido en incremento en comparación con el año pasado, de acuerdo con los datos proporcionado por Pemex y Sedena.
Son más de 700 kilómetros de ductos los que atraviesan el estado, por lo que la estrategia de seguridad para evitar la extracción de hidrocarburos, está siendo coordinada por la Federación, dado a que se trata de un delito federal.
De las tomas clandestinas que se realizan en ductos, se extraen ilegalmente gasolina, diesel, turbosina, combustóleo, Gas LP, entre otros. Esta actividad, además de ser un delito, también representa un riesgo elevado para las personas, las propiedades y el ambiente.
Asimismo, el funcionario mencionó que los casos donde más se han registrado estos delitos son en la región de El Sauz, en el norte del municipio, por lo que se ha visto más movimiento por parte de las autoridades estatales y federales en dicha zona.
