Repasan historia de la guerrilla en Chihuahua

En su ponencia "Documentos confidenciales de la guerrilla", basada en su libro "Los Informantes".

Saúl García

  · viernes 26 de octubre de 2018

Manolo Aguirre

El periodista y catedrático Javier Contreras Orozco, director general de El Heraldo de Chihuahua, presentó ayer su ponencia “Documentos confidenciales de la guerrilla”, de su libro “Los Informantes”, en el marco de la XL Semana del Humanismo de la Facultad de Filosofía y Letras de la UACh, en la que destacó el trabajo de investigación de diez años sobre el asalto al cuartel de Madera en 1965, “el reto fue tratar de hacer un seguimiento, una investigación diferente a lo ya conocido”, refirió el doctor Contreras.

Además, el investigador de la máxima casa de estudios explicó que producto de la investigación dentro del ámbito universitario, realizó un seguimiento diferente a través de documentos confidenciales de Gobierno, así como de infiltrados, testimonios y su archivo personal, sin dejar de lado la “suerte del reportero” que logró para realizar esta obra, “Los Informantes, más que un producto académico, es un producto de investigación periodística”, dijo ante los alumnos de la FFyL, así como de la Normal Superior del Estado.

Titulada “Movimientos Sociales”, la XL Semana del Humanismo recibió ayer en el Cine Club de Filosofía y Letras al doctor Javier Contreras para que disertara su ponencia magistral, en la que alumnos tanto de Filosofía como de la materia de Historia de la Normal Superior del Estado pudieron escuchar y participar en la conferencia, además de ser acreedores de la obra del también director regional de la OEM en Chihuahua.

Fue la profesora Irma Perea quien dio lectura a la trayectoria del periodista Javier Contreras, previo a la explicación de cómo logró, producto de un trabajo de 10 años, realizar dicho libro, planteándose Contreras como hipótesis el trabajo de agentes de Gobierno infiltrados en los diferentes grupos de guerrillas, siendo una de las principales estrategias del Gobierno para aniquilarlas.

Además –en la misma hipótesis-, una labor de redes de informantes que advirtieron al Gobierno las acciones, estrategias y planes de grupos guerrilleros, y le permitieron a la parte oficial combatirlas por medio de enfrentamientos contra policías, en emboscadas, provocando desconfianzas entre ellos mismos (guerrilleros) y la paranoia de sentir que había dentro de sus filas traidores.

Parte del material de trabajo utilizado por el investigador universitario fueron algunos diarios de informantes, informes, documentos confidenciales, entrevistas con sobrevivientes y algunos actores de esos hechos; consulta hemerográfica, documentos y archivos clasificados, “el objetivo, reconstruir hechos, fuera de la historia oficial, y con una línea conductora: documentos confidenciales”, explicó el doctor Contreras, además de la suerte de reportero.

Chihuahua, escenario de tres guerrillas: la primera en 1965 con un grupo armado de Arturo Gámiz; la segunda, en 1968, un grupo de Óscar González Eguiarte, sobreviviente del asalto a Madera (1965) y finalmente en 1968, el comando Chihuahua, liderado por Diego Lucero, en 1972, siendo ésta la guerrilla universitaria, con el conocido triple asalto bancario, “veíamos aquí el germen de Cuba en las escuelas normales rurales”.

undefined

Explicó que en Chihuahua se gesta la primera guerrilla de corte marxista, similar a la de Cuba, conformada por estudiantes y campesinos liderados por Arturo Gámiz, en la que recordó cómo el 23 de septiembre de 1965 tres grupos de ciudadanos atacaron al cuartel en Madera, quienes gracias a la información de los infiltrados ya los esperaban con 150 elementos castrenses, siendo ésta la primera emboscada a la guerrilla creada para tales fines.

La LigaComunista 23 de Septiembre fue creada en 1973, inspirada en la fecha de asalto al cuartel de Madera; el asalto al cuartel de Madera, el 23 de septiembre del 65, días previos, el Gobierno ya sabía del ataque gracias a toda la información con la que contaban, por lo que “ya los esperaban”.

Aprovechó para explicar parte de la suerte de reportero que tuvo el doctor Contreras, ya que recibió un diario de uno de los guerrilleros del 65, “cuando veo ese diario y lo tengo en mis manos, lo veo como una joya de reportero, ¿te interesa?, te lo regalo”, relató en su anécdota.

Además, cuando trabajaba sobre la guerrilla universitaria (1972), recibió de uno de los agentes de Previas (hoy ministerios públicos) una carta de Avelina Gallegos, mujer que murió debido a un ataque militar durante el asalto a los tres bancos (15 enero del 72), donde este agente le tocó ir a la escena del crimen, misma en la que se encontraba Gallegos sin vida, y éste conservó la carta que posteriormente regaló al doctor Conteras.

Según explicó, cuando el agente se jubiló acudió a él para obsequiarle dicha carta, le dijo que había entregado todas las evidencias de Gallegos, excepto la carta, misiva en la que explicaba sus motivos y argumentos a su novio de la participación en la guerrilla universitaria con Diego Lucero.

Parte del adiestramiento militar que recibieron algunos guerrilleros de la época estuvo a cargo del capitán Lorenzo Cárdenas Bajaras, quien se decía un militar rebelde, pero que nunca dejó de servir al Gobierno y, a su vez, adiestrar a guerrilleros no sólo en Chihuahua, sino en diferentes partes del país.

Sobre la tercera guerrilla en 1972, habló de los servicios de inteligencia, a cargo de la Dirección Federal de Seguridad; de la brigada blanca contra escuadrones rojos, de la infiltración en su apogeo con documentos, contactos y fichas, del grupo de inteligencia militar (GISE), así como a través de los “contactos” o informantes se conoce de las actividades y miembros de la Liga Comunista 23 de Septiembre en Chihuahua.

En la conclusión de su hipótesis, narra, “el exterminio de las guerrillas en México, en las décadas de los 60 y 70, fue una estrategia de Gobierno por medio de la infiltración en las células guerrilleras para desgastarlas, confrontarlas entre ellas mismas y enfrentarlas con equipos de policías que los esperaban…”