/ martes 14 de mayo de 2024

Hechos y criterios | Votar con responsabilidad

Las cosas cambian dirán algunos, y otros expresan que no tanto. A la distancia, el México actual no es ciertamente el mismo que cuatro o cinco décadas atrás, pero en cuestión electoral bastantes cosas continúan igual, a pesar de los avances en esa materia.

Las prácticas propagandísticas, las acusaciones y señalamientos mutuos entre candidatos, los acarreos, el uso de recursos públicos para apoyar las candidaturas oficiales, las promesas que luego no se manifiestan o se cumplen, las amenazas si se vota por determinado partido, el abstencionismo, etc., son algunas costumbres que continúan y parece no pueden controlarse.

Hace ya cuarenta y un años, este 15 de mayo, que en el proceso electoral de ese año el entonces Arzobispo de Chihuahua expuso un folleto bajo el título Votar con responsabilidad, una orientación cristiana, en que enunciaba elementos por los cuales los ciudadanos católicos debían asumir su deber cívico de acudir a las urnas y participar en política en sentido amplio.

Otros documentos eclesiales vendrían después según los procesos electorales en boga, pero el citado, a base de preguntas que aún hoy todavía se hacen muchos ciudadanos, católicos o no, sirvió para aclarar dudas, y en nuestra actualidad puede surtir el mismo efecto, ello no obstante los cambios ideológicos, tecnológicos y de otra índole de los últimos lustros.

Algunas de las preguntas señaladas y sus respuestas son de la siguiente índole: ¿Es un deber de todo ciudadano católico votar en las elecciones?; en las actuales circunstancias, ¿es recomendable abstenerse de votar?; ¿pueden los pastores de la Iglesia ordenarles o indicarles a los laicos por cual partido –coalición o movimiento en este caso- deben votar?; ¿puede un solo partido representar los intereses de todos los católicos?; ¿cuáles ideologías actuales son incompatibles con la fe cristiana?; ¿se agota la participación de los electores con la acción de votar?; a la hora de votar ¿cómo distinguir si un partido político defiende principios contrarios a la conciencia cristiana?; en definitiva, en la situación actual de México ¿qué características debe buscar un católico en el partido o candidato al que quiera apoyar con su voto?...

Hay otras preguntas que dependen más de las circunstancias de ese tiempo, aunque pueden extenderse a las actuales. Y hay, como expresamos, otras orientaciones –no imposiciones- hechas por distintos pastores que pueden auxiliar a los laicos para que su actuar en su participación política sea responsable. Y, además, no se dirigen los documentos única y exclusivamente a los católicos sino a cualquier ciudadano sea del partido que sea o sin partido.

Las cosas pueden cambiar. Los principios siguen. ¿Lo ven?


Ing. Civil, articulista y redactor de Notidiocesis


Las cosas cambian dirán algunos, y otros expresan que no tanto. A la distancia, el México actual no es ciertamente el mismo que cuatro o cinco décadas atrás, pero en cuestión electoral bastantes cosas continúan igual, a pesar de los avances en esa materia.

Las prácticas propagandísticas, las acusaciones y señalamientos mutuos entre candidatos, los acarreos, el uso de recursos públicos para apoyar las candidaturas oficiales, las promesas que luego no se manifiestan o se cumplen, las amenazas si se vota por determinado partido, el abstencionismo, etc., son algunas costumbres que continúan y parece no pueden controlarse.

Hace ya cuarenta y un años, este 15 de mayo, que en el proceso electoral de ese año el entonces Arzobispo de Chihuahua expuso un folleto bajo el título Votar con responsabilidad, una orientación cristiana, en que enunciaba elementos por los cuales los ciudadanos católicos debían asumir su deber cívico de acudir a las urnas y participar en política en sentido amplio.

Otros documentos eclesiales vendrían después según los procesos electorales en boga, pero el citado, a base de preguntas que aún hoy todavía se hacen muchos ciudadanos, católicos o no, sirvió para aclarar dudas, y en nuestra actualidad puede surtir el mismo efecto, ello no obstante los cambios ideológicos, tecnológicos y de otra índole de los últimos lustros.

Algunas de las preguntas señaladas y sus respuestas son de la siguiente índole: ¿Es un deber de todo ciudadano católico votar en las elecciones?; en las actuales circunstancias, ¿es recomendable abstenerse de votar?; ¿pueden los pastores de la Iglesia ordenarles o indicarles a los laicos por cual partido –coalición o movimiento en este caso- deben votar?; ¿puede un solo partido representar los intereses de todos los católicos?; ¿cuáles ideologías actuales son incompatibles con la fe cristiana?; ¿se agota la participación de los electores con la acción de votar?; a la hora de votar ¿cómo distinguir si un partido político defiende principios contrarios a la conciencia cristiana?; en definitiva, en la situación actual de México ¿qué características debe buscar un católico en el partido o candidato al que quiera apoyar con su voto?...

Hay otras preguntas que dependen más de las circunstancias de ese tiempo, aunque pueden extenderse a las actuales. Y hay, como expresamos, otras orientaciones –no imposiciones- hechas por distintos pastores que pueden auxiliar a los laicos para que su actuar en su participación política sea responsable. Y, además, no se dirigen los documentos única y exclusivamente a los católicos sino a cualquier ciudadano sea del partido que sea o sin partido.

Las cosas pueden cambiar. Los principios siguen. ¿Lo ven?


Ing. Civil, articulista y redactor de Notidiocesis