La Junta de Gobierno del Banco de México decidió disminuir en 50 puntos base el objetivo para la Tasa de Interés Interbancaria a un día a un nivel de 5%, con la finalidad de tener un mejor ajuste de los mercados financieros nacionales luego de que la inflación general anual aumentara de 2.15 a 3.17% entre abril y la primera quincena de junio.
De acuerdo con un informe del Banco de México, la contracción de la actividad observada en el primer trimestre se profundizó en el segundo, a pesar de que en mayo algunos indicadores de diversas economías presentaron cierta mejoría.
La inflación en las economías avanzadas se ubica por debajo de los objetivos de sus respectivos bancos centrales, por lo cual las autoridades monetarias disminuyeron las tasas de interés a niveles históricamente bajos y utilizaron su balance para propiciar un funcionamiento ordenado de los mercados financieros.
Aunque la reapertura de algunos sectores y regiones en mayo y junio propiciara cierta recuperación en la actividad económica, la afectación ha sido considerable y persiste incertidumbre, de acuerdo con Banco de México.
Por lo anterior, se prevén mayores condiciones de holgura en el horizonte en el que opera la política monetaria y el balance de riesgos para el crecimiento se mantiene significativamente sesgado a la baja.
Los retos derivados de la pandemia para la política monetaria incluyen un efecto mayor al previsto de la ampliación de la brecha negativa del producto; y menores presiones inflacionarias en el ámbito global.
Mientras que se espera un incremento en episodios adicionales de depreciación del tipo de cambio, problemas logísticos y de suministro de algunos bienes y servicios, y mayores costos asociados a la adopción de medidas sanitarias.
Debido a las escenarios previstos, la Junta de Gobierno decidió por unanimidad disminuir en 50 puntos base el objetivo para la Tasa de Interés Interbancaria a un día a un nivel de 5%.
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