El sector restaurantero en la ciudad estimó una pérdida del 70 por ciento de las ventas, debido a las restricciones instruidas por el Consejo Estatal de Salud como medida de contención frente a la alza de contagios de Covid-19 en la entidad.
Así lo dio a conocer Andrés Nava Salinas, presidente de la Asociación de Restauranteros de la Canaco (Cámara Nacional de Comercio) en Chihuahua, que agrupa a 120 negocios formales de este giro en el municipio.
“La situación que estamos viviendo actualmente que se está tornando de nuevo alarmante, pero sería mucho más complicado y grave que pasáramos a un semáforo rojo en el que la actividad se paraliza casi por completo”, expresó.
Indicó que al reducir los aforos en un 30 por ciento las ventas bajan un estimado de 70 por ciento, por lo que la administración de los restaurantes tiene que ser muy precavida en sus costos de operación que son proveedores, renta, insumos, servicios y salarios.
“Sí se sobrevive, pero tienes que controlar muchos tus gastos hacia adentro, para no castigar la nómina, esa siempre hemos procurado que se mantenga intacta”, observó.
Mencionó que a diferencia de diciembre, en enero bajan las ventas, y eso siempre se tiene considerado, por lo que este nuevo ajuste en la semaforización no impactará en la misma medida que en las ocasiones anteriores en que también se restringió el aforo a estos negocios, siempre y cuando se logren frenar los contagios.
“Es muy difícil cuantificarlo ahorita, lo que tenemos que cuidar mucho es que no se cierren los negocios para que no se pierdan los empleos ni esa cadena productiva económica”, advirtió.
Dijo que si bien afectará económicamente es un lineamiento que se tendrá que seguir, y tanto sociedad como iniciativa privada “tendremos que hacer lo que nos corresponde”.
“Hacemos un llamado a toda la ciudadanía de la capital, a que nos pongamos el cubrebocas, sin distinción, en todo momento, a que guardemos la sana distancia, a que si no hace falta no hagamos conglomerados de gente, filas, a que nos cuidamos todos, esta cuarta oleada ya está presente y está pegando muy duro”, agregó.
A su vez, las y los colaboradores de restaurantes consideraron que la situación ha puesto en riesgo la pérdida de empleos.
“En esta sucursal del centro contamos con 16 trabajadores, pero ahorita sólo tengo a 7. Estamos rotando los descansos para no tener que despedirlos, pero si esto empeora, no va a haber de otra”, dijo Erick Hernández, gerente de un negocio ubicado en la avenida Cuauhtémoc y 16 de Septiembre.
De las 22 mesas que a diario se llenan, hoy sólo están habilitadas 6 y de esas por la mañana sólo había un par de clientes: “Estamos prácticamente vacíos, y así ha estado”, expresó.
Relató que desde el domingo recibieron la notificación acerca del cambio en el semáforo de riesgo Covid, y se les ordenó restringir la capacidad del local al 30 por ciento.
“Ese día fue el último que nos fue bien, sí nos ha pegado de inmediato, y también va a afectar a los proveedores porque pedimos por semana de acuerdo a la cantidad que vamos a necesitar”, agregó.
Para los salones de eventos la situación no es muy distinta, ya que señalaron que será dentro de los próximos fines de semana cuando se enfrenten a las problemáticas que traerá esta restricción.
Comentaron que ante la incertidumbre del comportamiento de la pandemia varios clientes deciden postergar las fechas en las que planeaban rentar el establecimiento, por la restricción del cupo.
Lo anterior implica que el negocio dejará de percibir los ingresos planeados y con ello se afectará a la plantilla laboral, principalmente a meseras y meseros que dependen de la cantidad de eventos que se puedan abrir.