A estas alturas, las películas y series en donde la tecnología replicaba a la perfección las capacidades de los humanos, dejaron de ser ficción y pasaron a convertirse en nuestro presente. Hoy en día, la tecnología en general está presente en muchos de los aspectos de nuestra vida cotidiana, como es el caso de la Inteligencia Artificial (IA).
Lo mejor es que la IA ahora está al alcance de todas las personas que cuentan con un dispositivo electrónico, pues se han desarrollado proyectos que son abiertos al público en general, como lo es el poder generar dibujos con tan solo introducir una palabra o una frase.
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¿Qué es la IA?
La inteligencia artificial es la tecnología que hace que las computadoras repliquen las capacidades que realizamos los seres humanos, tales como ver, razonar, comprender, traducir el lenguaje hablado y el escrito, y analizar una gran cantidad de datos que excedan la cantidad que los humanos podemos examinar. La IA abarca diversas disciplinas, las cuales van desde la informática, análisis de datos, neurociencia, lingüística, filosofía y psicología.
Actualmente hay una variedad de aplicaciones de la IA en distintos campos, como por ejemplo las asistentes virtuales Alexa, Siri o Cortana; en logística y transporte para evitar atascos y optimizar el tráfico; en finanzas para ayudar a los bancos a detectar fraudes; y en salud para la recolección de datos e identificar factores que podrían desarrollar una enfermedad.
Con el auge de las páginas de internet y aplicaciones que generan dibujos con inteligencia artificial, se abrió el debate de si esta reemplazaría a los artistas e ilustradores, pues incluso una ilustración hecha por una IA, ganó un concurso en una feria estatal de Colorado, Estados Unidos. La obra titulada “Théâtre D’opéra spatial” fue creada con Midjourney, un programa que genera imágenes a partir de una descripción textual. Esta decisión causó revuelo, abriendo el debate del posible reemplazo de los artistas por la IA.
En el campo de la medicina, la IA ha sido de gran ayuda para buscar y analizar datos médicos, los cuales sirven para descubrir conocimientos que aporten nuevas mejoras en resultados de salud para los pacientes. También ha dado grandes aportaciones al análisis de imágenes (tomografías, rayos X, resonancias magnéticas) y decisiones clínicas.
¿Cómo aprende una inteligencia artificial?
Esta tecnología aprende a través de “machine learning” o “aprendizaje automatizado”, el cual funciona con algoritmos los cuales les permite a las computadoras reconocer patrones que se presentan en forma de datos masivos y de esta forma, hacer predicciones; lo que posibilita a la computadora realizar las tareas.
Capacidades que la IA no puede replicar
- Empatía: la tecnología puede replicar la comunicación verbal, textual y visual, la cual puede ser usada en la atención al cliente, pero capacidad que tenemos los seres humanos de empatizar con el cliente y hacer una comunicación basada en emociones, marca una diferencia a la hora de diferenciar de un cliente comprendido a uno insatisfecho.
- Liderazgo: la gestión en el crecimiento de los grupos humanos y la recuperación de miembros de una organización, son acciones avanzadas que esta tecnología no podrá reemplazar.
- Creatividad: a pesar de que la IA se ha encargado de realizar creaciones espectaculares, lo hace aprendiendo a través del archivo histórico y no tienen el mismo nivel de innovación productiva del arte hecho por el ser humano.
