Luego de que se conociera el caso de Ximena S.S. quien aparentemente fue víctima de una red de trata de menores de edad, la dueña de una casa de huéspedes, niega totalmente haber visto a la adolescente encerrada en una de sus habitaciones.
La señora Socorro aseguró que en esa casa de huéspedes las personas menores de edad están estrictamente prohibidas, por lo que antes de que quieran entrar a trabajar a ese rubro, deben primero confirmar su edad con la credencial de elector.
“Yo la conocí de vista porque andaba rondando por aquí, ella se metía droga y nomas andaba aquí por estas calles, pero yo no la conocí personalmente ni la trate, y esto solo deja en mal a mi negocio y a las trabajadoras de este lugar” comentó la señora.
Señaló que de igual forma en caso de que hubiera participado en ese tipo de acciones, las personas que trabajan con ella de ninguna manera hubieran dejado sin denunciar esas acciones, ya que son gente a la que conoce desde hace más de 20 años. Recalcando que si ve que en ocasiones agentes municipales recorren las calles tratando de mantener el orden.
La señora abrió ese lugar desde hace más de 20 años, y niega rotundamente haber sido testigo o cómplice en alguna de esas acciones donde secuestraban menores de edad y las mantenían encerradas en contra de su voluntad. Externó que ella abre desde las 9 de la mañana y cierra a eso de las 10 u 11 de la noche, que ya no existe movimiento en las calles.
“Aquí son cuatro cuartos, ¿acaso creen que no hubieran escuchado gritos o golpes? las muchachas entre ellas se cuidan, esas son mentiras de gente dañada” agregó la señora Socorro, comentando que posiblemente si existe o no complicidad de autoridades y gente que vende algún tipo de sustancias, ella no está enterada.
Algunas trabajadoras sexuales señalan que en ocasiones la veían por el sector de la calle 12ª, entre Libertad y Victoria, en pleno centro de la ciudad, con gente que era adicta a las drogas, por lo que se acercaban solo a entorpecer, ya que los corrían inmediatamente.
Dijo que el día de ayer un operativo acudió a las instalaciones a revisar cuarto por cuarto del lugar para asegurarse de que no existiera ninguna persona ahí dentro, en contra de su voluntad.