El éxodo de hombres y mujeres migrantes continúa su paso por la ciudad de Chihuahua Capital, con personas procedentes de Perú, Venezuela, El Salvador, entre otros países, quienes sortean las inclemencias climáticas de las tierras chihuahuenses, que son contrarrestadas con la calidez de quienes ejercen su ministerio a favor de las familias en movilidad.
De acuerdo con datos de la Casa del Migrante San Agustín, apenas el pasado viernes 16 de diciembre, se recibieron un total de 90 personas a quienes se atendieron al recibirlos con alimentos y algunos insumos para que pudieran continuar su viaje con destino al vecino país del norte.
Las 90 personas llevaban una cobija nueva, con la que pueden cubrirse las bajas temperaturas que se registran ante el inminente ingreso de la estación invernal, y que ya ha provocado temperaturas gélidas, como en el amanecer de este domingo 18 de diciembre, cuando la estación de la zona norte del municipio de Chihuahua, en Majalca, registró -6.1 grados centígrados.
En ese sentido, Casa San Agustín agradeció las aportaciones de las Hermanas del Verbo Encarnado, quienes tejen prendas de estambre durante el año, para obsequiarlas en fechas decembrinas a las personas migrantes, quienes reciben sudaderas, chamarras, bufandas y gorros, confeccionados por las hábiles y amorosas manos de las religiosas.
Esta ayuda se suma a la brindada los primeros días de este mes de diciembre, a la caravana migrante, en la que más de mil personas transitaron por el territorio estatal, pasando también por esta ciudad de Chihuahua, y en la que la Casa del Migrante San Agustín entregó comida, colchonetas, cobijas, ropa de bebé, chamarras para niñas, niños, y tallas para personas adultas. También bufandas y gorros, para dotar a las personas que provenían de climas cálidos en su paso por Chihuahua.
Es por todo lo anterior, que Casa del Migrante San Agustín requiere insumos que son básicos para la atención a la población migrante, como latas de atún, galletas dulces y saladas, café, leche, azúcar dentro de los alimentos no perecederos.
Además, se requiere ropa de invierno en buen estado, como suéteres, chamarras, pantaloneras, sudaderas, pantalones gruesos; la ropa de verano no resulta útil en este momento, por lo que se solicita no incluirla en las donaciones.
También, son necesarias cobijas de tamaño individual, para dotar a las personas en su viaje, quienes en su mayoría, llegan a la frontera de Ciudad Juárez, que colinda con la ciudad de El Paso, Texas, Estados Unidos.
Para la atención en la Casa del Migrante, para las personas que pernoctan en el refugio, se necesitan huevos, aceite, y café de grano, entre los alimentos más esenciales para alimentar a las familias en movilidad. Entre los artículos de higiene personal, se reciben shampoo, jabón, pasta y cepillos de dientes, rastrillos, crema corporal, desodorantes para hombre y mujer.
La ayuda se recibe en la Casa del Migrante San Agustín, en la calle Ladrilleros número 5101, de la colonia Ladrilleros, que se localiza a unos 480 metros del punto en las vías férreas de donde suben y bajan del tren.
