Un quinto hombre fue secuestrado por los mismos criminales que se llevaron a los cuatro integrantes de la comunidad LeBarón, informó el activista Julián LeBarón; se trata de un originario de Madera quien presumiblemente aún se encuentra en poder del grupo delictivo.
Según relataron Miguel Ángel Moreno Sánchez y Manuel Horacio Ríos Jacob —los últimos dos en ser liberados— a Julián, la víctima es Rubén Servando de la comunidad de Mesa del Huracán, quien fue privado de la libertad y llevado hasta el municipio de Nácori Chico, en Sonora, a donde también transportaron a los dos integrantes de la comunidad LeBarón.
"Se los llevaron hasta Sonora, como 15 horas por terracería, los tenían en una casa de seguridad. Ahí se encontraban con otro secuestrado que tenía trece días en el lugar, a él se lo llevaron porque dijeron que había pasado información de un grupo a otro, pero es una persona sencilla que trabaja en un desponchado", compartió.
De este nuevo caso se sabe que hay ante la Fiscalía General del Estado (FGE) una denuncia formal por su desaparición y una pesquisa activa para dar con su paradero.
“El día que se lo llevaron fue a su potrero a llevar alimento a sus caballos, lo acusaron de andar llevando y trayendo información a los contrarios y que por eso lo habían detenido, incluso ellos mismos lo conocen”, relató el activista.
Julián recibió ayer a Miguel y Manuel, luego de que fueran abandonados el martes en la comunidad de La Norteña, en Madera, donde fueron rápidamente resguardados por elementos de la Fiscalía General del Estado, quienes los llevaron al municipio de Cuauhtémoc para hacer pruebas médicas y recoger la declaración de ambos.
Refirió que a los integrantes de la comunidad LeBarón los torturaron para que confesaran que ellos eran policías, ya que como no tenían credenciales, pensaron que eran agentes y que estaban investigando a esa célula criminal en Madera.
Explicó que a los cuatro fueron privados de la libertad el domingo en la gasolinera de El Largo Maderal, cuando a Christian Bruce LeBarón (hermano de Julián) se le descompuso la motocicleta en el monte, por lo cual decidieron ir a la estación de combustible a comprar aceite, donde se encontraron a los sujetos armados.
"Les dijeron: "Está nevando déjanos ir por este chavo (Christian), se nos va a morir", y los malandros le dijeron a uno de ellos que fuera en su moto por él bajo la amenaza de que si no regresaba matarían al resto, entonces fue por Christian y ellos solos fueron a la casa en Madera, para que no les hiciera nada, pero ellos los estuvieron torturando para que aceptarán que eran policías", compartió Julián LeBarón.
Contó que luego de que liberaron a Christian y Sherm el día 23 comenzaron a llegar muchos agentes al lugar, y fue cuando decidieron llevarse a Miguel y Manuel a Sonora, "a los primeros dos los liberaron primero porque se dieron cuenta que eran lebarones, los torturaban para sacarles información, pero no tenían nada que decir, decían que eran arriba de 10, a lo mejor 20, eran puros chavalos drogados, ellos decían que eran de la banda del Jaguar", dijo el activista.
Desde el pasado 21 de enero, Miguel y Manuel, en compañía de otros dos integrantes de la comunidad mormona en Galeana, fueron reportados como desaparecidos cuando viajaban al municipio de Madera, motivo que alertó a los integrantes de la comunidad, como a las mismas autoridades, quienes fueron notificadas de estos hechos.
Señalan al Puma
Con respecto a estos hechos, los mismos integrantes de la comunidad LeBarón y los propios agentes de la Fiscalía General del Estado (FGE) recibieron información de que el responsable de estas desapariciones es un sujeto apodado como el Puma.
Julián LeBarón refuerza esta versión de la FGE sobre la operación que mantiene el grupo de este sujeto en Madera, toda vez que los secuestrados denunciaron que vieron logotipos y otras insignias que eran alusivas a esta célula criminal.
En los organigramas generados por la fiscalía en el estado, destaca que Jesús Omar A. R., alias el Puma, es hijo de Francisco Javier A. M., el Jaguar, quien en octubre de 2021 fue capturado por elementos de la Sedena por una investigación que mantiene por delincuencia organizada en la región serrana de Madera y posiblemente relacionado por la masacre de LeBarón en 2019.
A poco más de cuatro años de que se perpetró la masacre en los límites de Sonora y Chihuahua, nuevamente el grupo armado identificado como Gente Nueva del Jaguar está involucrado en otra agresión contra esta comunidad.
Los datos de inteligencia y los mismos seguimientos que han tenido por años en contra de esta agrupación criminal dan cuenta de que el grupo ha utilizado diferentes brechas para trasladarse de Chihuahua a Sonora, incluso el día de ayer se reveló que a dos de los secuestrados se los habían llevado a una casa de seguridad en el municipio de Nácori Chico, en el vecino estado.
En las diferentes comunidades de Madera se han registrado decenas de desapariciones, todas presuntamente cometidas por esta organización criminal.
De acuerdo con la FGE, otra de las figuras que se encontraban en el círculo cercano del Puma era Óscar P. P., el Ruso, un sujeto que fue capturado en días pasados en un operativo con elementos de los tres niveles de gobierno; también se menciona otro sujeto apodado como el Caballo, quien no ha sido identificado plentamente.
Óscar P. P., como al grupo de la Gente del Jaguar, se le relacionó con la desaparición de cuatro ganaderos el pasado 26 de febrero de 2023, quienes al trasladarse en la comunidad de Rancho Huaca al ejido Huizopa, dentro del municipio de Madera, desaparecieron sin dejar rastro y sin más pista para que se facilitara su búsqueda.
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Francisco Javier tiene tres hijos que colaboran en diferentes actividades para la célula criminal, los cuales son identificados como Vidal, Ezequiel y el mayor de los hermanos, Jesús Omar, quienes tienen apodos similares como animales, que es característico de esta agrupación.
Francisco A. M., el Jaguar, es hijo de Pedro y Hortensia, una pareja que radica en diferentes localidades del municipio de Madera, y quienes con el paso de los años procrearon nueve hijos, entre ellos al presunto capo.
Dentro de ese organigrama, también se encuentran los hijos Marco Antonio, Ofelia, José Luis, Martina, Pedro, Luis, Dolores, Óscar y Francisco Javier, quienes, de acuerdo con los informes recabados por los agentes investigadores, colaboran de diferentes maneras en el grupo que fundó el Jaguar en el municipio de Madera.
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