Karen López, madre de familia, considera que el agresor sexual de su pequeña hija recibió una sentencia infinitamente mínima, debido a que él goza de su libertad mientras que las víctimas siguen sufriendo a consecuencia de su mala acción.
El bombero Raymundo S. B., recibió una sentencia de tres años y cuatro meses de prisión por el delito de abuso sexual de su nieta de cuatro años de edad, sin embargo el juez le dio el beneficio de estar en libertad.
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Tras hacerse público el caso de abuso sexual del empleado del Ayuntamiento salieron a la luz dos denuncias más por parte de familiares, quienes también fueron agredidos.
Karen López detalló que entre más denuncias se acumulen puede perder el beneficio de libertad que le otorgaron.
La madre de familia detalló que lo que buscan es que se haga justicia, porque este agresor aprovechó la confianza que se le brindó para atacar a la pequeña, a quien además amenazó para que no dijera nada a sus padres.
A pesar de que la autoridad municipal aseguró que el elemento de Bomberos había sido suspendido, trascendió que nunca fue cesado de sus funciones públicas. Sigue activo como elemento y con acceso a más personas que podrían ser víctimas de este sujeto.
A la fecha, Asuntos Internos no ha procedido contra el agresor.
La familia además se vio afectada porque al salir a la luz pública la agresión contra la pequeña, dos personas más decidieron denunciar que también sufrieron a causa del mismo agresor.
Karen detalló que empezaron a comprender los problemas familiares que enfrentó Raymundo, además de que han descubierto detalles muy delicados.
Aun con todo ello, el agresor consiguió una pena mínima, “Me parece injusto y preocupante”, señaló la madre de familia.