Construcciones a punto de caer, otras que sólo conservan los muros exteriores, y tapias que sirven como “picaderos” o guaridas de malvivientes, se observan por diferentes puntos del Centro Histórico de la ciudad de Chihuahua, entre los cuales, se localizaron principalmente en la zona de la colonia Obrera, alrededores del Paseo Bolívar, y la zona de tolerancia, en las colindancias entre las calles Libertad y Juárez.
En un recorrido por el Centro Histórico de la ciudad de Chihuahua, desde la calle Aldama, a la altura de la calle 21 hacia el oriente, se encontraron diversos inmuebles que se encuentran en mal estado, algunos ya colapsaron, quedando únicamente los muros exteriores, en el interior, basura, tierra, escombro y vigas expuestas de lo que antes fueron locales comerciales.
Así se puede ver en la esquina sur de la calle Aldama y 21 y en la siguiente cuadra, en el cruce con la calle 23. En la acera norte de la calle, se pueden apreciar fincas abandonadas, que han sido vandalizadas, con los cristales rotos y llenas de basura, de lo que era una zona tradicional de contratación de mariachis, bares y cantinas tradicionales, cuya época de esplendor pasó hace ya unas décadas.
Avanzando hacia el sur, en la calle 27 y Rosales, se encuentra el Bar La Camelia, que sufrió el derrumbe de uno de sus muros y que dejó un boquete en la pared. Hacia el poniente, siguiendo por la calle Antonio Rosales, a la altura de la 17, se pueden ver algunas construcciones que se aprecian sin habitar, y en mal estado.
En el lado poniente del centro, bajando por la calle Cuarta y a la altura de la Coronado, en la esquina se encuentra una construcción de las primeras edificaciones de la ciudad de Chihuahua, sólo quedan las paredes exteriores y por adentro no hay muros interiores ni techo. Hay un arco, que sirvió como entrada, que está clausurado por unas maderas, para evitar que ingresen personas ajenas. En el terreno de enseguida, ya fue derrumbada la construcción y fue cerrada con malla ciclónica.
Avanzando hacia el norte por la calle Cuarta, a la altura de la Allende, en la esquina hay una edificación de color amarillo, que sufrió derrumbe, colapsando hacia el interior. Hay rastros de haberse incendiado, y en el lugar, se pudo apreciar cómo personas intentaban meterse, con fines desconocidos.
Mientras tanto, unas cuadras más al norte, en la calle 12 y Libertad, continúa el retiro de escombros de la edificación que colapsó hace unos meses, y que aún conserva el rótulo en sus muros exteriores de Abarrotes César. El inmueble se encuentra dentro de la zona de tolerancia, donde se aprecia la presencia de sexoservidoras, quienes por su actividad acostumbran sentarse en sillas acomodadas en la banqueta, con riesgo de que por la proximidad de los edificios en riesgo puedan sufrir algún accidente.
A unos metros del Supremo Tribunal de Justicia, sobre la calle Décima, entre Libertad y Juárez, se aprecia una serie de edificaciones que fueron establecimientos comerciales en el abandono, que aunque su construcción se aprecia más moderna, del siglo pasado, la falta de reparaciones por los desperfectos que causa el tiempo, también podrían dañar la estructura.