La familia Cruz lleva poco más de medio siglo visitando a sus seres queridos sepultados en el Panteón Municipal Número 1 y el Cementerio de Dolores al lado. Este 1 de noviembre, visitarán hasta 42 familiares.
Mónica y Marina Cruz acuden juntas todos los años, dando limpieza a las tumbas de 42 familiares que se han sumado a lo largo del tiempo. Además, llevan flores y retocan las lápidas con pintura.
Acostumbran llegar a las 9 de la mañana y platican para pasar el tiempo. Ya tienen una ruta a seguir que han elaborado a través de los años, visitando cada una de las tumbas de sus 42 familiares en esos dos panteones.
Raul, esposo de Marina, comentó que fueron sus suegros quienes les inculcaron la tradición de ir todos los años a visitar a los numerosos familiares en los panteones. Los 35 años que lleva casado con Marino no han faltado a los cementerios durante esta temporada.
Jorge y Luis Barrón, gemelos de 65 años de edad, llevan 40 años acudiendo al Panteón Municipal Número 1 cada primero de noviembre. Van a limpiar y a visitar a una tía y los suegros de Luis que se encuentran en el lugar.
Por su parte, Vanessa Ochoa acudió este lunes al mismo panteón con su hija menor de edad. Es el primer año que acude a “echar una manita de gato” a la tumba de su mamá, ya que anteriormente era su madre quien iba cada 1 de noviembre.
“Mi mamá venía cada año con mi papá y ahora me toca venir”, comentó.
Autoridades municipales estiman que alrededor de 35 mil chihuahuenses acuden tan sólo a los panteones de la zona de San Jorge en los últimos días de octubre y primeros de noviembre.
