En cuestión de segundos el Río Satevó cobró vida. Pasó de ser un yermo seco a un caudaloso flujo que arrasó con todo su paso. Así se aprecia en este espectacular video compartido por Chihuahua Tiempo Severo.
El fenómeno registrado en video es una riada, también llamada avenida de agua (conocida en algunas regiones como crecida de río o arroyo, creciente o aguas altas). Consta de la elevación del nivel de un curso de agua mucho mayor que el flujo medio de este.
También te puede interesar: Río Florido está totalmente seco; la sobreexplotación provocó la extinción de decenas de especies
En el caso del río Satevó hay un dramático aumento de cero nivel de agua a una cantidad mucho mayor, debido al contraste entre la prolongada sequía que sufre nuestro estado, con la llegada del monzón mexicano que está causando copiosas lluvias en algunos municipios.
Durante una riada como la que se presenta en el video, el caudal de un curso de agua aumenta tanto que el lecho del río natural no puede contener toda el agua. Entonces el agua lo desborda e invade un terreno más extenso que se llama lecho mayor o llanura aluvial.
Chihuahua Tiempo Severo compartió el video con la siguiente leyenda: “El siguiente video nos lo enviaron desde #Satevo Chih. Nos recuerda cuando llegan las aguas del Monzón en África e inunda los ríos. Pues muy semejante situación el caudal del río Satevó que desemboca en el Río San Pedro con caudal directo a la Presa Las Vírgenes en el municipio de Rosales Chih.”
Las riadas pueden agravarse debido a la falta de árboles que obstaculicen la corriente y reduzcan la velocidad del agua. Por lo que se puede decir que la sequía tan larga puede ser una causa de que se presenten fenómenos como éste.
La fuerza del agua puede ser peligrosa y dañar infraestructura o arrastrar personas, animales o vehículos, por lo que son fenómenos extremadamente peligrosos, que con frecuencia dejan daños materiales o pérdidas humanas.
El río Satevó
A pesar del riesgo que puede representar, la riada es una buena noticia para la agricultura de nuestro estado, ya que el río Satevó es parte de un sistema de ríos que riegan la región agrícola más productiva de Chihuahua.
El río Satevó es tributario del río San Pedro, famoso por el vado de Meoqui, espacio de gran importancia ecológica para nuestra región. También, el San Pedro desemboca en la presa Francisco I. Madero, mejor conocida como “Las Vírgenes” la cual es una reserva de agua fundamental para el desarrollo de la principal zona agrícola de nuestro estado.
De acuerdo al portar “Para todo México”, el río Satevó pertenece a la región hidrológica “Bravos-Conchos” la cual cubre el 31.46% del territorio estatal y se encuentra en el centro del estado desde el sur hacia el norte. Está conformada por las cuencas del río Bravo del Norte y del río Conchos. A su vez, el río San Pedro está entre los principales tributarios del Conchos a lado del Chuvíscar, río Sacramento, río Florido, río Parral, río Valle de Allende y río Santa Isabel.