DELICIAS.- Luego de gritar decenas de veces "Chihuahua se queda sin agua,", de hacer llamados al presidente López Obrador y al gobernador Corral, los agricultores regresaron molestos luego de su fallido intento por entrevistarse con las autoridades federales y entregar de manera directa un documento con la justificación del porqué no se puede extraer agua de las presas locales.
"No venimos tristes, al contrario venimos animados pero molestos por los bloqueos de que fuimos objeto", expresó vía telefónica el ingeniero Martin Parga, dirigente de las Unidades de Riego de Meoqui, Rosales y Julimes, y quién acompañó al dirigente de la Aurech Salvador Alcantar, a San Luis Potosí.
Parga consideró que aunque no hubo golpeados, sí hubo represión hacia el grupo de unos 120 agricultores que buscaron el diálogo por enésima vez con el presidente de la República en SLP.
Informó que desde Zacatecas, los productores con rumbo a San Luis Potosí, fueron seguidos por la Policía Federal el martes. Ya el miércoles, los agricultores fueron impedidos de salir en los autobuses hacia el Centro de Convenciones de SLP.
Los autobuses fueron detenidos por un operativo orquestado por la Policía Municipal de San Luis, granaderos y elementos de la Guardia Nacional. Al verse copados, los agricultores tuvieron que salir en taxis, camionetas y otros a pie para llegar al Centro de Convenciones y buscar el diálogo.
Al no poder ingresar a entregar un documento a López Obrador, tuvieron que manifestarse, explicó Parga.
El dirigente agrícola dijo que hasta que no cierren la extracción de agua de la presa Madero, el movimiento de protestas pacíficas seguirá.
Ayer luego de las 3 de la tarde los productores regresaban vía carretera rumbo a Chihuahua y se enteraban del bloqueo que ejercían otros compañeros productores en Chihuahua, haciendo uso de su maquinaria agrícola.