Una casa arrasada y quince familias desalojadas en Urique, así como 17 más en Chínipas, viviendas inundadas en Batopilas y deslaves en los cerros de la región de Piedras Verdes, fueron el saldo de las fuertes tormentas que se registraron al mediodía de ayer, en la zona occidente del estado.
Los hechos comenzaron con una fuerte lluvia registrada a las 6 de la mañana de ayer en la citada región, lo que levantó el caudal del río para mediodía y luego crecidas con inundaciones en la zona.
Personal de Protección Civil informó que como dato oficial del desastre por las tormentas seguía como saldo blanco en los municipios de Chínipas, Urique, Maguarichi, Guazapares, Uruachi y Batopilas.
“Eran tres las viviendas que corrían peligro en la cabecera de Urique, sin embargo fueron 15 las que se desalojaron por el agua, y sólo una fue arrastrada por la corriente, afortunadamente ya había sido evacuada”, indicó personal de comunicación social.
De igual manera, la presidente municipal de Urique, Mayra Díaz, indicó que en la cabecera del municipio el río se había desbordado, lo que obligó a más de 15 familias a dejar sus hogares para trasladarse a albergues temporales.
Las personas afectadas por la crecida del río fueron reubicadas en la secundaria y el bachillerato local, los cuales se encuentran en las zonas más altas de la región, impidiendo que sean alcanzados por el agua.
Por su parte, personal de Protección Civil acudió al lugar para brindar apoyo a los habitantes horas más tarde, pues según indican las autoridades municipales, el personal llegó después del desalojo.
De igual manera, la alcaldesa señaló que la falta de cobertura telefónica impide conocer a ciencia cierta los detalles del deslave del cerro en el área de la comunidad de Piedras Verdes, al norte de Urique.
Según la información preliminar, un cerro ubicado a dos horas de la cabecera municipal se desgajó por las lluvias y sepultó una casa localizada en las faldas del mismo, en donde se presume que se encontraban dos personas.
Sin embargo, esta versión no ha sido confirmada por las autoridades, pues “hasta ayer por la noche no era posible confirmar que los residentes estuvieran adentro del domicilio, por el problema telefónico”, indicó Mayra Díaz.
Otra de las problemáticas que señaló como impedimento para tener más detalles de la situación, es la falta de electricidad en dicha zona; de igual manera, confirmó que las familias en la cabecera están a salvo, pues cuentan con alojamiento suficiente.
