“Lo mejor que tiene la sociedad son las personas, no el dinero, por lo que sin el capital se económico y aportando el capital social, que es el trabajo y la voluntad de las personas, se puede construir una cooperativa exitosa, señaló el M.C Marcelo Schottlender, quien participa con una conferencia magistral en el Foro de Economía Social y Solidaria.

Señaló que ejemplo de ello es la cooperativa que se construyó en Israel, y que se puede replicar en México, adaptándose a las características de cada sociedad.

“La economía social tiene que dar el bienestar a las personas, no está entendido economía social como un tema de ayuda a alguien que no puede”, afirmó el entrevistado, quien participa el día de hoy con la conferencia “Experiencia del estado de Israel en cooperativismo y organización social para la producción replicable en México”.

En Israel se inició con actividades agrícolas y ganaderas, para posteriormente invertir en una industria pequeña que empezó a crecer, luego en negocios y después en servicios, y así se formó un nuevo sistema de economía social muy exitoso.

Esto, añadió, fue posible juntando voluntades, y la pasión por tener mejores condiciones, es decir se trata una inversión en la voluntad de las personas y eso es lo que trae el dinero.

Dijo que este sistema se puede adaptar a las mentalidades de cada país, pero siempre el común son las personas que quieran hacer algo por ellos mismos y no esperar a que alguien más les dé, pues el elemento humano es el fundamental, y el resto se soluciona.