Educación, seguridad social y espacios públicos, son las principales necesidades que registra la población indígena que radica en la ciudad y existen tres asentamientos San Andrés, Los Carrizos y El Venadito, donde habitan 729 personas de origen indígena y según los gobernadores de estos espacios, los jóvenes han comenzado a consumir drogas derivado de la falta de oportunidades para el desarrollo.
Ante ello el gobernador del asentamiento de San Andrés, Guillermo Negrete compartió que existen diversas necesidades entre la población indígena principalmente en el tema de educación, seguridad y falta de espacios públicos.
Argumentó que en diversas ocasiones y administraciones municipales han solicitado una cancha para que los jóvenes y niños puedan divertirse y practicar algún deporte; sin embargo, no ha habido respuesta alguna a pesar de tener grandes talentos.
Señaló que, por falta de atención tanto de las administraciones municipales como estatales, los adolescentes han comenzado a ingerir alguna droga por lo que han dejado de estudiar o trabajar.
Enfatizó que derivado de estas condiciones la población principalmente de San Andrés ha visto limitado su desarrollo.
El entrevistado explicó que la mayoría de los jóvenes que trabajan invierten su dinero únicamente para adquirir alcohol y drogas, por lo que dejan de lado también el mejoramiento a sus viviendas.
En el tema de seguridad social argumentó que se han presentado casos en donde mujeres embarazadas ante la falta de atención médica han perdido a sus hijos, incluso ellas mismas han muerto en el parto, por lo que indicó esta es una de las principales necesidades.
Aunado a ello expuso que existen escuelas en el asentamiento; sin embargo, muchas veces no cuenta con los servicios básicos para operar y mucho menos con el material didáctico apto para los estudiantes.
Por su parte, Ramón Rocha gobernador de los asentamientos de Los Carrizos y El Venadito, declaró que las familias por años han tenido que enfrentar condiciones deplorables, ya que no existen las oportunidades necesarias para que puedan desarrollarse.
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Indicó que una de las problemáticas que se han presentado es que derivado de los hechos delictivos en la zona serrana las personas que son desplazadas llegan a la ciudad; sin embargo, no encuentran las condiciones de trabajo adecuadas, así como de educación para sus hijos.
Informó que la mayoría de las causas de migración en la población indígena se debe a la falta de oportunidades laborales, así como de las condiciones tan precarias de salud, en las que difícilmente tienen acceso en la zona serrana, es por ello que se trasladan a Parral para poder recibir algún tratamiento, por lo que duran hasta un mes en espera de ser atendidos.
Publicada originalmente en El Sol de Parral
