En Parral son aires de otros tiempos y los bares y cantinas tradicionales, como centros de reunión para convivir, se mantienen de pie con el propósito de extender su permanencia en el gusto de sus clientes y entre ellos se encuentran tres ubicados en el centro de la ciudad como son el New York, París y Monterrey, los tres con nombres de ciudades.
Actualmente, la ciudad ofrece un sin número de lugares donde las personas pueden socializar y entablar amenas conversaciones, compartiendo alguna bebida hecha con agave, cebada o algún otro ingrediente, pero sobre todo para todos los gustos y bolsillos.
Entre unos de esos establecimientos todavía sobreviven varios que son toda una tradición, por mencionar algunos el New York, París y Monterrey, bares que han conservado su denominación a pesar del paso de los años y que llevan el nombre de ciudades, algo que en Parral en otros años era muy común que las cantinas se identificaran por alguna urbe o bien por otros lugares representativos del mundo.
Además de los mencionados con esa característica existen o existieron, El Manhattan, Hawái, Chapultepec, San Antonio, San Luis, Sahara, Niagara, California, Monte Carlo, Vietnam, El Suchiate, El Cairo y por su puesto el Bar Parral, entre otros.
¿Por qué llevan nombres de ciudades?
La razón por la cual se acostumbraba poner a las cantinas el nombre de alguna ciudad o algún lugar representativo del mundo, realmente se desconoce, pero algún motivo debió existir, como el caso del Bar Arias, por ser propiedad de la familia Arias o el Bar 490, porque según cuenta la historia su propietario ganó el premio de la Lotería Nacional con ese número.
Lo cierto es que en Parral las cantinas desde hace poco más de diez años están en decadencia y son muchos los factores a que se atribuye una crisis por la baja afluencia de clientes, entre ellos la violencia e inseguridad, el incremento en el costo de las bebidas, la falta de circulante, así como en aires de otro tiempo, los jóvenes no acuden al preferir los antros modernos.
Otra de las causas que se viene arrastrando, son los estragos que dejó la pandemia del Covid-19 y que incluso a muchos negocios los llevó a la quiebra y sus propietarios mejor optaron por cerrar, ya que, según estadísticas de la Unión de Comerciantes de Vinos y Licores, a finales del año 2023, de 77 establecimientos dedicados a este giro fueron 17 los que dejaron de funcionar.
Aunado a esto, la competencia es cada vez más fuerte, sobre todo porque actualmente los empresarios o emprendedores optan por darle un giro a sus negocios y que no sean simplemente cantinas, sino que funcionen como modernos antros e inclusive como restaurant bar.
Todo esto ha mermado considerablemente la clientela de las cantinas tradicionales, porque es muy cierto que los jóvenes no acuden y prefieren precisamente los antros modernos. En Parral, los clientes de cantinas, se sabe son regularmente personas mayores de 40 años, precisamente por las nuevas modas de lugares para convivir y departir con los amigos.
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A pesar de ello, las cantinas de antaño y tradición se niegan a morir y sobreviven esperando prolongar su existencia con la única regla establecida de ingreso: “No se admite la entrada a menores de edad ni a personas uniformadas”.
Entre los establecimientos que son toda una tradición al continuar funcionando, por mencionar algunos y que por cierto llevan el nombre de alguna ciudad o relacionado con un lugar del mundo, se encuentran el New York, París y Monterrey, ubicados en el centro de la ciudad.
Los propietarios, fieles al lema de Parral: “Sobre todo la Fe”, mantienen las puertas abiertas de sus negocios esperando que sus clientes asistan a socializar con los camaradas y entablar conversaciones amenas, donde se compartan bebidas por las emociones que en muchas de las ocasiones son por la alegría desbordante o como luego se dice “para ahogar las penas” por la tristeza de una decepción amorosa, la pérdida de un ser querido, entre otras.
Existen cantinas en Parral para todos los gustos, algunas decoradas con un estilo muy propio y entre ellas se encuentra el Mundos Bar, donde se exhiben diversos objetos, muchos de ellos antiguos y es una atracción muy especial del lugar, así como el Bar Cuarto Bat, donde se habla y se comenta mucho de beisbol, se disfruta de transmisiones de juegos de beisbol, pero además se exhiben trofeos y fotografías de peloteros y aficionados al rey de los deportes de antaño y de la actualidad.
Mientras estas cantinas muy de Parral sigan sobreviviendo y se mantengan de pie, que continúe la tradición de brindar y decir ¡Salud!
Nota original de El Sol de Parral
