Los Obispos de México se pronuncian ante los hechos de violencia suscitados en Culiacán y Ciudad Juárez, denunciaron públicamente estas situaciones y exigen a todo grupo criminal recapacitar ante el dolor y el sufrimiento que ocasionan a sus propios hermanos, asimismo, piden a las autoridades de todos los niveles, mantengan la estabilidad nacional y el Estado de Derecho ante el crimen organizado e invitan al pueblo de Dios a unirse este día a una Jornada de Oración para pedir a Dios toque el corazón de quienes hacen daño.
Fue durante las primeras horas del jueves, cuando personal de seguridad que trabaja en la recaptura de los reos fugados en Ciudad Juárez el pasado domingo, sostuvieron un enfrentamiento a balazos con Ernesto "El Neto", quien resultó herido y posteriormente murió durante el traslado a la Fiscalía de Distrito Zona Norte.
A raíz de esos hechos se comenzó a registrar incendio de vehículos, algunos establecimientos y enfrentamientos armados, los cuales hasta ese momento ascendían a 10 eventos durante la madrugada.
Transcurridas las horas se registró la captura de Ovidio Guzmán, hijo del exlíder del cártel de Sinaloa, Joaquín “El Chapo” Guzmán, confirmaron fuentes federales, lo que derivó que aeropuertos cerraran por los diversos ataques por parte del crimen organizado.
A través de un comunicado la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) se pronunció ante los hechos suscitados en Ciudad Juárez y Culiacán, mismos que han desatado actos de violencia contra la sociedad civil y corporaciones de seguridad.
El documento firmado por Rogelio Cabrera López, Arzobispo de Monterrey y Presidente de la CEM así como de Ramón Castro Castro Obispo de Cuernavaca y Secretario General de la CEM exponen a nombre de los Obispo de México “con profundo dolor e indignación, nos unimos en comunión de oraciones y solidaridad con las comunidades de Culiacán y de Ciudad Juárez que están viviendo días de incertidumbre y angustia”.
Resaltan que en medio de estos episodios de muerte y crimen que se padecen en la nación, denuncian públicamente estas situaciones y exigen a todo grupo criminal recapacitar ante el dolor y el sufrimiento que ocasionan a sus propios hermanos.
Reafirman que tanta violencia sigue manchando de sangre la propia historia y debilitando los procesos de paz.
"Pedimos a las autoridades de todos los niveles, mantengan la estabilidad nacional y el Estado de Derecho ante el crimen organizado".
"Invitamos a todo el pueblo de México a unirse en una intensa y especial Jornada de Oración el día de hoy 06 de enero, pidiendo a Dios que toque el corazón de quien hace daño a sus propios hermanos y suplicamos a la Santísima Virgen María de Guadalupe, Reina de la paz que interceda para convertir nuestros corazones para ser verdaderos arquitectos y artesanos de paz", concluyen.
Publicada originalmente en El Sol de Parral