“Llévele las cañas frescas a 15”, “baratas las coronas”, “ricos los elotes”, “a 20 los ramos” se pregonaba a lo largo de la calle 16 donde la algarabía, el gozo y el bullicio se conjuntan en la celebración del Día de Muertos que este año espera reunir a unas 60 mil personas en los panteones municipales de Chihuahua.
Son las 10:00 horas y ya hay gente por todos lados, personas caminando de acá para allá a lo largo de la calle donde se encuentran instalados cientos de puestos que ofertan toda clase de productos; es tanta la variedad que es difícil captar todo lo que se comercializa.
“Pásele güerita”, “Aquí le damos más barato”, “No se cobra por ver”, “Llévele, llévele”, son sólo una de las tantas frases que se llegan a percibir en esa romería que se convierten los cementerios estos días, cuando se conmemora a quienes se adelantaron en el camino.
La entrada del panteón Municipal 2 está saturada, lo que es ocasionado principalmente por los vendedores de flores que ofrecen ramitos de 15 pesos que mucha gente adquiere para adornar las tumbas de sus familiares.
Además, en este punto se concentran los que por unas monedas ayudan a quitar maleza, barrer el contorno de los sepulcros, y llevar agua hasta el lugar, labores que realizan con ayuda de botes, asadores y palas que cargan en sus hombros. Son de todas las edades, pues inclusive hay hasta niños que lo hacen.
Caras tristes y otras no tanto se dejan ver. Están aquéllos que todavía les duele mucho la partida de una persona y quienes el paso del tiempo les ha aligerado su pena.
En el panteón Municipal 1, el acceso principal de igual manera se encuentra atiborrado de visitantes, pues en esta entrada también se hacen presentes los comerciantes de flores, el artículo preferido por la mayoría, más que las coronas con imágenes religiosas, por ejemplo.
Este cementerio reunió más gente que el anterior, aquí sí se volvía un tanto complicado el desplazamiento por los pasillos, que miden aproximadamente de tres metros, así que su anchura no es muy pronunciada. Para las 11:30 horas los pasillos lucieron llenos y conforme transcurría el día parecía que aumentaba la afluencia.
De hecho, de acuerdo a información proporcionada por Ricardo Martínez García, director de Servicios Públicos Municipales, se esperan 15 mil visitantes diarios entre el 1 y 4 de noviembre, es decir, aproximadamente 60 mil ciudadanos que acudirán a visitar las tumbas de sus seres queridos.
Es de mencionar que en los cuatro panteones municipales hay 109 mil 312 tumbas, derivado de un censo realizado en estos camposantos que están abiertos en un horario de 07:30 a 18:00 horas.
El funcionario recordó que se cuenta con servicio de localización de tumbas, además de garantizar el abasto de agua para la limpieza de tumbas, ya que existen llaves y pilas disponibles, así como pipas de agua al interior de los cementerios.
Aparte, se señalizaron los cuatro panteones municipales, indicando patios y mapas, así como depósitos de basura.
El operativo de limpieza en los cementerios a cargo del Municipio ha sido de forma permanente, sin embargo, se intensificó desde el mes de septiembre a fin de abatir los efectos del temporal de lluvias con el crecimiento de hierba, retirando un total de mil 156 toneladas de basura diversa.
Se destacó además que en meses pasados se realizó el remozamiento y pintado de bardas, así como de oficinas y baños de los panteones municipales. Asimismo, se incorporaron vehículos ligeros como tres cuatrimotos y un minicamión para supervisar los camposantos.
Cabe precisar que actualmente los espacios para tumbas nuevas en los panteones municipales 1, 2 y 3 se encuentran saturados, pues sólo se pueden reutilizar al enterrar un segundo cuerpo con un familiar directo; aunque en el panteón Municipal 1 hay espacio en nichos para mil 588 urnas.
El panteón Municipal número 4, ubicado en la zona sur de Carrizalillo, hay espacio para nuevas tumbas hasta en más de 10 años.
Hoy en día se trabaja en la propuesta para la creación de un quinto panteón municipal, para atender la necesidad de la ciudadanía en este servicio tan sentido.
Mientras que las tumbas abandonadas suman 28 mil 300, denominadas de esta manera porque ya no se ha pagado la temporalidad o no ha sido detectado familiar que dé atención a la tumba, pero no pueden removerse, pues muchas de ellas tienen temporalidad a perpetuidad, lo cual era permitido hasta hace algunos años.