Dos de las últimas veces que el conductor y actor Xavier López “Chabelo” pisó suelo chihuahuense, lo hizo bastante alejado del estereotipo con el que muchas generaciones lo recuerdan: en vez visitar esta capital, ataviado como el eterno niño que muchos pensaban que era, y hablando con su típica voz infantil, lo hizo en un plan adulto.
Antes había venido enfundado precisamente en ese personaje que durante incontables domingos despertó a la niñez de Chihuahua y el resto de los “cuates de provincia”. Por ejemplo, en la década de los setenta, se presentó en varios maratones a beneficio de las causas sociales de la Cámara Junior.
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Más recientemente, también apareció en su rol de infante malcriado en el Teatro del Pueblo de la Feria de Santa Rita, en el último año que esta tuvo sus instalaciones sobre la avenida Pacheco, donde ahora está la Comandancia Sur, en el año de 2002.
Tras bambalinas, y todavía fuera de su emblemático personaje, ese día llegó con un poco de retraso a su presentación por una causa justificada: el equipo de sus amores, por cuyo apoyo muchas veces fue abucheado en su propio programa de “En familia”, las Águilas del América, se habían coronado esa tarde como campeones del futbol mexicano, luego de trece largos años de sequía. Llegó ligeramente tarde, porque se quedó en el hotel hasta que terminaron los festejos.
De niño alegre a adulto serio
Ese mismo año, “Chabelo” no volvería a Chihuahua. En su lugar vino un adusto Xavier López a principios de diciembre al Centro de Convenciones, para formar parte de una campaña de concientización en favor del Teletón. Lo hizo acompañado de Ernesto Laguardia y del grupo M5, banda juvenil que, al lado de los años que vivió el conductor, duró apenas un suspiro.
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Aquella ocasión, para muchos jóvenes que aún se habían criado con el simpático niño de la mencionada emisión dominical, fue todo un impacto escuchar la ronca voz del conductor. Y parece chiste, pero no faltó la jovencita que expresara la idea de que pensaba que el personaje sí era un niño de verdad, y que tenía la voz aguda.
Sin embargo, si de seriedad y adultez se trata, ninguna visita como la que hizo a Chihuahua en mayo de 2009. Específicamente cerca de Creel, en plena Sierra Tarahumara, donde en su calidad de actor, participó en la filmación de la cinta “Cartas a Elena”, al lado de la también fallecida Carmen Salinas e Irma Dorantes.
En aquella ocasión, a “Chabelo” del niño sólo le quedó el sobrenombre por el que era más popularmente conocido, y se puso en los zapatos del cantinero del pueblo donde se desarrolla la historia, y dejó los típicos pantalones cortos y camisolas de beisbol, para vestirse a la usanza campirana, con mezclilla, camisa a cuadros y sombrero, hablando desde luego, con su voz real, la grave que durante buena parte de su carrera no empleó.
