El Niño es un fenómeno que genera cambios de temperatura drásticos en todo el mundo, afectando además a la vida marina.
La Organización Meteorológica Mundial (OMM) informó que hay un 90% de probabilidad que las condiciones dominantes evolucionen hacia un escenario neutro con respecto al fenómeno El Niño durante el período de marzo a mayo de 2023. Pero ¿Qué es el fenómeno de El Niño?
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El fenómeno de “El Niño”
El Niño Oscilación del Sur (ENOS) es un fenómeno natural que se caracteriza por la alteración del sistema climático océano-atmósfera. Surge de la interacción entre aire y el mar en el Pacífico Tropical (desde el sur de México hasta el norte de Perú), en otras palabras, es cuando la superficie del océano pacífico se calienta más de lo normal, sobre todo en el Este y la costa de Sudamérica, provocando lluvias en las costas occidentales de América y haciendo que los días sean más cálidos de lo normal.
Este fenómeno ocurre cada 3 o siete años. La última vez que se presentó fue en 2016, cuando la temperatura de los océanos que están alrededor de la Gran Barrera de Coral en Australia y las islas Fiji hasta Hawái aumentó de manera considerable. A pesar de que los océanos han incrementado su temperatura a causa del cambio climático, el fenómeno de El Niño en 2016 contribuyó a que el planeta entrara en uno de los periodos más cálidos jamás registrado hasta entonces.
¿Qué provoca?
El fenómeno de El Niño provoca que los vientos alisios (corrientes de aire que se generan de manera natural) se debiliten o cambien su dirección. Este cambio en las corrientes de aire y mar libera calor a la atmósfera, alterando las condiciones climatológicas en todo el mundo. En algunos lugares aumentan las lluvias y en otras disminuye, al igual que las temperaturas.
¿Por qué se produce?
Se produce por el calentamiento del centro y este del Pacífico ecuatorial. Provoca que los vientos alisios sean más débiles de normal e incluso desaparecen, lo que genera que las aguas cálidas del centro del Pacífico se acumulen. Con el calentamiento se activa la lluvia, provocando inundaciones en la costa oeste de América del Sur y las islas del Pacífico central. Además, la falta de vientos debilita el afloramiento hacia el este, impidiendo que las aguas profundas suban a la superficie, acelerando el calentamiento de la zona. Los vientos alisios se debilitan aún más como resultado del calentamiento, ya que reduce la diferencia de presión Este-Oeste.
¿Cómo afectará a Chihuahua?
Según las predicciones de los modelos y las evaluaciones de los expertos, hay un 90% de probabilidad de que durante mayo se impongan condiciones neutras con respecto a El Niño, un 80% de que persistan durante los períodos de abril a junio y 60% de mayo a julio.
En caso de presentarse este fenómeno, según la Conagua, en el país “se observarían anomalías por debajo de lo normal en la mayor parte del territorio nacional, especialmente en los meses de verano y otoño, que a su vez podrían dar origen a condiciones de sequía intensa. Estas anomalías negativas se presentan con mayor intensidad en la parte noroeste, oeste, centro, este y sur del país, a excepción de zonas localizadas en Chihuahua, Coahuila, Guerrero y el norte de Chiapas que presentan condiciones húmedas”.
