Diversos estudios han dado a conocer que cerca de 20 mil muertes en el país al año son causadas por el consumo de grasas trans, las cuales se pueden evitar, razón por la cual en México ya se está trabajando en la aplicación de un artículo agregado a la Ley General de Salud.
En febrero del presente año, la Cámara de Diputados aprobó por unanimidad de votos agregar el Artículo 216 Bis a la Ley General de Salud, el cual establece que: “los aceites y grasas comestibles, así como los alimentos y bebidas no alcohólicas, no podrán contener en su presentación para venta al público aceites parcialmente hidrogenados, conocidos como grasas trans, que hayan sido añadidos durante su proceso de elaboración industrial”.
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Y es que, de acuerdo con lo presentado en la exposición de motivos del dictamen, se menciona que el alto consumo de las grasas trans aumenta 34 por ciento el riesgo de muerte por cualquier causa; 28 por ciento de defunciones cardiopatías coronarias y 21 por ciento la aparición de cardiopatías coronarias.
Asimismo, aumenta de siete y diez por ciento el riesgo de decesos por enfermedad cerebrovascular isquémica y diabetes, respectivamente.
Por tal motivo, la Secretaría de Salud a nivel federal se propuso impulsar esta reforma, a fin de regular el uso de este tipo de grasas y, con ello, complementar la estrategia del etiquetado frontal en los alimentos dañinos para la salud con el propósito de disminuir las enfermedades no transmisibles y las muertes originadas por las mismas.
De esta manera, se está cumpliendo igualmente con las recomendaciones emitidas por la Organización Mundial de la Salud y de la Organización Panamericana de la Salud, así como con los acuerdos tomados en la Declaración de Río de Janeiro en 2008 en los que se establece que se buscarán medidas regulatorias que limiten y prohíban parcialmente el uso de estas grasas.
Es preciso mencionar que el exhorto emitido por la OPS fue que, a más tarde en este año, deberían estar implementadas políticas regulatorias, las cuales se evaluarán para medir el efecto; asimismo, se pide estén acompañadas de campañas educativas para concientizar sobre los efectos perjudiciales para la salud.
Cabe señalar que, de acuerdo con el dictamen presentado, dicha reforma entrará en vigor el 20 de septiembre de 2023, pues se establece que será 180 días posteriores a su publicación en el Diario Oficial de la Federación, la cual se realizó el pasado 24 de marzo.
Los ácidos grasos trans (AGT) fueron descubiertos hace 50 años y comenzaron a ser utilizados principalmente en productos horneados; sin embargo, se encuentran en algunos cárnicos y lácteos. Estos tienden a acumularse bloqueando las arterias, lo cual genera problemas considerables en la salud.
Por todo lo anterior, las autoridades se han comprometido a continuar trabajando con la concientización y la regulación de reglamentos a fin de disminuir el consumo de sustancias que son dañinas para el cuerpo y que se presentan en diversos alimentos.