El candidato a la alcaldía de Chihuahua por el partido Movimiento Ciudadano, Enrique Valles Zavala, fue denunciado por un presunto acto de discriminación a la comunidad de la diversidad sexual, que resulta ser violento por las palabras, ademanes y otros elementos que fueron atribuidos a un discurso de odio, cuando realizó una declaración sobre el tema de matrimonio igualitario.
El documento fue presentado ante un agente del Ministerio Público, adscrito a la Fiscalía Especializada en Derechos Humanos, en la que señala al candidato del partido político local Movimiento Ciudadano.
➡️ Únete al canal de WhatsApp de El Heraldo de Chihuahua
En el relato de los hechos, mencionó que el miércoles 8 de mayo de 2024, en el Tecnológico de Monterrey, Campus Chihuahua, se llevó a cabo el foro Actúa Mx, de la Federación de Estudiantes del Tecnológico de Monterrey, en el cual estuvo invitado Enrique Valles Zavala, candidato a la alcaldía de Chihuahua, por parte de Movimiento Ciudadano.
Dentro de una dinámica de las llamadas ‘ping pong’, Valles Zavala estaba sentado en el escenario con la conductora, y se le hacían preguntas que debía responder de forma rápida y clara, con una sola palabra a lo que mencionaba su interlocutora.
“Cuotas” a lo que Enrique Valles Zavala, responde “obligatoriedad”; luego la moderadora dice “género matrimonio igualitario” a lo que Enrique Valles Zavala, mientras mueve la cabeza y hace ademanes de poco agrado o bien de desagrado, responde: “Posibilidad, y ahí perdón voy a romper rápido, eh; voy a decir por qué posibilidad. Matrimonio es un hombre y una mujer, lo demás debemos encontrar la forma jurídica de que sea, pero no rompamos la historia de lo que es. Con mucho respeto, eh”.
El activista defensor de las personas de la diversidad sexual, Rolando Nájera expuso que ésa respuesta expone un acto de discriminación, refleja un discurso de odio que se puede materializar en cualquier forma de expresión, incluidas imágenes, dibujos animados o ilustraciones, memes, objetos, gestos y símbolos y puede difundirse tanto en Internet como fuera de él.
Argumentó además, que es discriminatorio, sesgado, fanático e intolerante; o, peyorativo, basado en prejuicios, despectivo o humillante de un individuo o grupo. Se centra en factores de identidad, reales o percibidos de un individuo o grupo, que incluyen su religión, etnia, nacionalidad, raza, color, ascendencia o género; pero también en otras características como su idioma, origen económico o social, discapacidades, estado de salud u orientación sexual, entre otras muchas.
“Sin duda alguna, las expresiones que se realizan son una forma manifiesta de violencia y discriminación basadas en la orientación de género. Es decir, son expresiones realizadas desde un punto de vista personalísimo, pero como parte de una expresión de ideas en un espacio público”, manifestó Rolando Nájera.
Y concluyó: “Por todo lo anterior, es que debemos tener por establecido que la nota resulta discriminatoria y violenta hacia mi persona”.
