Los Estados deben elevar su recaudación local y asumir loscostos políticos, por lo que deben retomar el cobro de la tenenciavehicular, pues tan solo este año 13 entidades no lo hicieron ydejaron de recaudar ocho mil 120 millones de pesos, montoequivalente a la deuda de Campeche, Querétaro, Baja CaliforniaSur, Yucatán y Guerrero, afirmó el Instituto Mexicano deCompetitividad (Imco).
El presidente del instituto, Juan Pardinas, afirmó que latenencia es un impuesto progresivo y con alto beneficio para elerario de los Estados, toda vez que 84 por ciento de lo recaudadopor este concepto lo paga el 30 por ciento de los hogares másricos, mientras que el 30 por ciento de la población con menosrecursos contribuye con solo el tres por ciento.
Por ello insistió en que resulta necesario que las entidadesfederativas retomen la aplicación de dicho impuesto y en dadocaso, lo apliquen bien, pues afirmó que únicamente Nayarit locobra de manera adecuada.
El especialista aseguró que el cobro de la tenencia contribuyeal combate contra el cambio climático y tiene beneficios a lasalud pública.
En conferencia de prensa para dar a conocer los resultados delÍndice de Información Presupuestal Estatal (IIPE) 2016, elespecialista recordó que en 2012 se eliminó el impuesto sobre latenencia a nivel federal, por lo que se otorgó a los Estados lafacultad de cobrarla.
“Desde entonces 13 Estados la eliminaron, mientras que 18 lasubsidian y solo Nayarit la cobra de manera regular”,comentó.
Incluso Juan Pardinas propuso reducir el impuesto a la nómina ysustituirlo por el de la tenencia de vehículos, pues insistió enque es un impuesto progresivo, en virtud que lo paganprincipalmente quienes tienen mayores recursos.
“El Imco propone reducir el impuesto a la nómina porque es unobstáculo a la generación del empleo y la economía formal ysustituirlo por impuestos menos distorsionantes como el impuestosobre la tenencia de vehículos”, comentó.
Al respecto, dijo que el impuesto sobre la nómina es recaudadopor las 32 entidades “a pesar de que no debería de sercobrado”, pues implica diversas desventajas como el hecho de quees un impuesto al trabajo formal, orilla a las empresas a producirmenos o a fijar mayores precios, y además presiona los sueldos ala baja y reduce las oportunidades de empleo.
De esta manera, consideró necesario que las autoridades localesasuman los costos políticos que implica el cobro de impuestoslocales, pues afirmó que en México solo el 3.1 por ciento deltotal de los ingresos por gravámenes es recaudado por losgobiernos estatales, mientras que el Gobierno federal cobra el 96.4por ciento del total.
En ese sentido, dijo que los Estados tienen la oportunidad derecaudar más impuestos a través del impuesto al hospedaje, a laenajenación de bienes mueble, celulares, espectáculos públicos,loterías, apuestas permitidas y a las casas de empeño pormencionar algunos.
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