Al filo del mediodía del domingo, un grupo de escritores y familiares se reunió en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes, en CDMX, para recordar el legado del poeta, traductor, ensayista y activista chihuahuense Carlos Montemayor, en su décimo aniversario luctuoso.

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En dicho homenaje participaron José Vicente Anaya, Marco Antonio Campos, Mario Sánchez Carbajal, Raúl Manríquez Moreno y Pablo Espinosa como moderador.

Sin faltar su hija Victoria Montemayor, quien señaló que “para mí la misión del padre y el escritor no está disociada. Cuando empecé a estudiar Letras Italianas hablaba con él de los escritores que iba descubriendo, los poetas que me emocionaban, entonces el diálogo se convertía en un intercambio literario”.

Comentó que los primeros libros que su padre le regaló fueron de arte, “apenas he estado descubriendo que tanto el arte como la literatura tienen mucho que ver con la relación que tuve con mi papá o en lo que yo he forjado en mi vida en estos momentos”.

Asimismo, mencionó que así como se creó el Premio Nacional Carlos Montemayor, se ha dado su nombre a la Biblioteca Pública Central, a la Biblioteca de la UACJ, el Festival de las Lenguas de América de la UNAM del que fue promotor.

Su legado se mantiene vivo también en las tesis de maestría y doctorado que se están realizando actualmente y en tres composiciones basadas en su obra, como la que se estrenará este 27 de febrero en el Paraninfo Universitario, a cargo de la Orquesta Sinfónica de la Universidad Autónoma de Chihuahua, inspirada en el poema “Finisterra”, escrita y dirigida por el maestro Raúl García Velázquez.

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