Héctor “Caramelo” Chávez, el popular personaje que pone en alto la bandera mexicana en cada partido de futbol de la Selección Nacional, ha cambiado los vuelos internacionales siguiendo al equipo de sus amores, por brindar alegría navideña a través de las luces y colores de la decoración de todo un parque de 700 metros cuadrados, frente a su casa.
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“La pandemia nos ha golpeado a todos, tanto en lo anímico, sentimental, económico; sin embargo, tenemos que darnos nuestro espacio para aminorar el estrés que provoca esta situación. Este esparcimiento en un área pública, nos permite un poco de desfogue, siempre que cuidemos las medidas que nos han dado las autoridades, y despertar la alegría de la navidad, que nos hace olvidar por lo que hemos batallado y sufrido, y nos consagramos al nacimiento del Niño Dios”, refirió el entrañable personaje que se distingue entre el público en los grandes estadios donde juega la escuadra nacional, con la bandera que contiene la palabra “Chihuahua” en ella.
“Caramelo” Chávez refirió que ha vivido en el fraccionamiento Campestre desde hace dos décadas, y hasta este 2020 que perdió la asistencia a los partidos por motivo de la pandemia, adoptó el parque que se encuentra frente a su hogar para hacerle unas mejoras, y poco a poco, empezó con la titánica tarea de colocar adornos navideños.
“Para mí fue un año muy difícil este 2020, porque a mí me encanta seguir la Selección Nacional, y ya tenía varios ahorros guardados, en los juegos preolímpicos y olímpicos de Tokio, algunos partidos amistosos en Holanda y en Austria; otros en Estados Unidos, y algunos partidos de eliminatoria para el mundial de Qatar 2022, y yo venía juntando ese cochinito”, lamentó, aunque ganó la grande satisfacción de llevar alegría a quien menos imaginó, los niños, y entre ellos, los habitantes de la Granja Hogar.
Se organizó una visita en grupos de 20 niños de la benemérita institución, a quienes se les entregaron bolsitas de dulces, y vivieron la magia de pasear en el parque de luces, observando todas las medidas de prevención, para que pudieran disfrutar de más de 82 mil luces, además de decorativas inflables, un pino de más de 20 metros, en un espacio de 700 metros cuadrados; y 33 días de trabajo.
En una primera instancia, inició como una iniciativa de Héctor “Caramelo” Chávez, que atrajo a la administración de la colonia, y posteriormente, los mismo vecinos ofrecieron su ayuda, cooperación, tanto en trabajo, como material, para lograr toda la instalación, creando un ambiente de cooperación, dentro del fraccionamiento, con suma cautela y prevención dentro de las reglas del espacio habitacional privado.
“Hemos hecho a muchos niños sonreír, despejarse del enclaustro en casa, en un ambiente totalmente virtual; y ahora salir en caravana, ver la villa desde el automóvil, poderse bajar aunque sea unos cuantos momentos para tomarse la fotografía con los personajes de los inflables que pusimos, les hacemos la vida un poquito más alegre. Ese ha sido el mayor logro”.
Adelantó que la víspera de navidad, la noche del 24 se colocará el Niño Jesús, en el nacimiento que han instalado, para destacar el verdadero sentido de la celebración.
“Ya le han puesto el Caramelo`s Park, el Parque Navideño y la Villa Navideña, pero a mí, lo que más me interesa es que disfruten del esfuerzo que hicimos un grupo de vecinos, y ojalá que en todos los rincones de nuestra ciudad –lejos de lo que corresponde al gobierno aportar-, nosotros demos un poquito más. El nombre es lo de menos”, finalizó.
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