Vecinas y vecinos de la colonia Francisco Villa acudieron ante las instalaciones del Palacio Municipal y se apostaron en la explanada de la avenida Independencia para manifestarse contra la construcción de viviendas que se realiza en el predio que habían solicitado para expandir las instalaciones del jardín de niños Rubén Jaramillo.
“Había una petición desde el 2018, nunca se recibió una respuesta, nada más un acuse de recibo del ahora presidente donde dice que ese terreno está pedido, solicitado por el Gobierno del Estado, porque el kínder pertenece al Gobierno del Estado. La persona a la que le vendieron es vecino, pero todo lo hicieron por ‘lo oscurito’, nadie de los vecinos cercanos se dio cuenta. Dice el vecino que vivió 40 años en lo que le decimos el Club”, denunció una vecina, quien manifestó que el vecino miente, ya que se utilizaba para reuniones vecinales y que a una media cuadra, está la verdadera casa donde sí vive, y que es una vivienda de dos pisos, con acabados modernos, que sobresale del resto de las viviendas de la zona.
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El llamado Club, se ubica en la calle Lázaro Cárdenas número 48, que se edificó por cooperación de los vecinos de la entonces naciente colonia Francisco Villa, para que se celebraran reuniones para gestionar en una junta vecinal los servicios de electricidad, agua potable, drenaje, entre otros.
Después de eso, pasó a ser el jardín de niños Rubén Jaramillo, donde inició y permaneció por muchos años. Luego se fincó, y se construyó en el predio con el numeral del 50, en un terreno muy pequeño donde solo están tres salones y la dirección, y al que le faltan instalaciones como áreas lúdicas, una biblioteca escolar, entre otros servicios escolares con los que sí cuentan la mayoría de los planteles.
Entre las pancartas que sostenían los manifestantes, se podían leer leyendas como “Los derechos de nuestros hijos y nietos están sobre todo interés privado”, “¿Por qué ceder a un particular los derechos de una propiedad municipal para vender viviendas?”, entre otras.
Los manifestantes señalaron que después de un trámite que no se les comunicó a los interesados, se adjudicó la propiedad al supuesto dueño, quien no respetó las cláusulas de recibir el terreno para vivir en el lugar, y vendió la propiedad en una inmobiliaria, empresa que luego trató de derribar con dompes el Club que habían construido los fundadores de la colonia.
“Los vecinos no estamos dispuestos a dejar que se finque. Me dicen que lo están viendo y lo están analizando”, acotó otra vecina.
En el lugar, se encontraban también los tres regidores de la fracción edilicia de Movimiento de Regeneración Nacional, Morena, que pertenecen al Honorable Ayuntamiento de Chihuahua, América Mayagoitia, Ishtar Ibarra y Eliel García.
