Esta noche se llevó a cabo en la parroquia del Sagrado Corazón de Jesús un emotivo concierto que se tituló “Réquiem de W.A. Mozart”, en memoria del P. Javier Campos S.J. y P. Joaquín Mora S.J., evento que que fue dirigido por el maestro José Alejandro Rico Proa, donde participaron el Coro Diocesano de Chihuahua, el Coro de la Ciudad de Delicias, el Taller Coral Sagrado Corazón de Jesús, la Camerata Novohispana, así como los solistas Angélica Ortiz, Mariana Herrera, Miguel Holguín y Antonio Villegas.
La función inició a las 8:45 de la noche aproximadamente, y los asistentes desde temprana hora estaba haciendo fila para entrar al recinto del Sagrado Corazón de Jesús, donde se pudo apreciar la presencia de familias completas y de personas mayores, de igual modo los músicos demostraron su dominio en cada uno de los instrumentos, así como los artistas dieron un toque muy emotivo en cada una de sus interpretaciones con su espectacular voz, y quienes iban con vestimenta en color negro todos.
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Es de señalar que la última obra de Wolfgang Amadeus Mozart, Réquiem en re menor K. 626, marca un culmen de la música religiosa. En ésta se interpretan los textos latinos correspondientes a la misa para difuntos del rito católico y plasma la indiscutible genialidad del compositor.
Hoy se interpretó esta magna obra in memoriam de los sacerdotes jesuitas Javier Campos y Joaquín Mora, asesinados hace un año al tratar de resguardar la vida de Pedro Palma, quien murió de igual manera a los pies del Sagrado Corazón en la iglesia de Cerocahui, Sírvase esta interpretación como un sentido homenaje al comprometido servicio que realizaron los padres Campos y Mora por los más desposeídos, así como una plegaria por todos aquéllos que como Pedro Palma han perdido la vida víctimas de la violencia en nuestro país.
Ad maiorem Dei Gloriam (para mayor gloria de Dios)
El programa que duró aproximadamente una hora estuvo integrado por: 1 Introitus: Requiem aeternam. 2. Kyrie Eleison. 3. Sequentia: Dies Irae, Tuba mirum, Rex tremendae, Recordare, Confutatis, Lacrymosa. 4. Offertorium: Domine Jesu Christe, Hostias. 5 Sanctus. 6. Benedictus. 7. Agnus Dei. 8. Communioe Lux aeterna.
José Luis Serra Martínez es el párroco del Sagrado Corazón de Jesús desde hace dos años, expresó sobre este evento: “Estamos recordando la muerte de Javier Campos, Joaquín Mora, Pedro Palma quienes fueron asesinados en la Sierra Tarahumara hace un año, ante otras más de miles de víctimas por la violencia, y los sacerdotes jesuitas eran compañeros míos y en esta ocasión queremos hacer memoria de este hecho, no tanto por ellos en especial, sino para recordar que nuestro país necesita mucho de la justicia y la paz.
“Sobre estos hechos en mi opinión, son cosas que no deberían de pasar, ellos fueron víctimas de cierta forma circunstanciales, perseguían a Pedro Palma, que también fue circunstancial, se meten a la iglesia, ellos tratan de protegerlo y también son asesinados, es circunstancial como la de muchos, muchos mexicanos y mexicanas que han sufrido la violencia en carne propia.
“Joaquín muy seguido venía aquí y celebraba misa, Javier no tanto, pero también venía a quedarse a dormir aquí en nuestra casa ya que somos de la misma congregación religiosa, la compañía de Jesús, somos hermanos yo los conocía desde que yo entré a la compañía hace 45 años.
“Para que haya verdadera justicia, se necesita empezar con la justicia de nosotros mismos, hay mucha violencia intrafamiliar, hay mucho abuso de pequeños, de personas de la tercera edad, con los vecinos, en fin desde ahí tenemos que empezar y trabajar poco a poquito por reconstruir el tejido social en nuestras colonias, escuelas, centros de trabajo, y desde ahí es donde se podrá construir la paz”, indicó José Luis Serra Martínez.
Por otra parte, José María Aguirre Barrio, coordinador del Coro Diocesano de Chihuahua, expresó que son 90 personas que integran este proyecto artístico en las cuatro secciones corales: sopranos, altos o mezzosopranos, bajos o barítonos y tenores, de igual manera contamos con la participación de cuatro solistas, una soprano, una mezzosoprano, un tenor y un barítono, así como una orquesta de cámara de 17 músicos, todos dirigidos por el maestro concertador José Alejandro Rico Proa, director asistente de la Orquesta Filarmónica del estado de Chihuahua, proyecto que surgió a raíz de la pandemia.
En su corta trayectoria ya se han presentado en diversos recintos como en el Teatro de la Ciudad de Chihuahua, en el Teatro de la Ciudad de Delicias, “ahora en esta ocasión estamos en esta iglesia por petición del padre José Luis para este concierto en memoria de los jesuitas, de igual forma tenemos varios proyectos en puerta que muy pronto daremos a conocer”, finalizó.
