La recaudación total por tarifas de agua potable es superior a 44 mil millones anuales, pero el costo de los servicios es ligeramente superior, es decir 67 mil millones de pesos, una cantidad enorme de subsidios para los sistemas de agua potable, dijo el doctor Eduardo Mestre Rodríguez, Consultor Senior de la Asociación Nacional de Entidades de Agua y Saneamiento de México (ANEAS).
Señaló que a la fecha no ha permeado la idea de que el agua paga el agua, por lo que ese recurso en lugar de irse a otros servicios se tiene que solventar el servicio del agua.
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Lo anterior en la conferencia magistral “Retos y perspectivas en los Servicios de Agua Potable y Saneamiento”, dentro del Encuentro ChihuAgua, donde comentó que el problema de agua potable en México es de 800 mil millones de pesos al medio urbano de acuerdo al Banco Mundial, pero en México eso es abismal debido a que este año el presupuesto federal llegará a 32 mil millones de pesos.
México es uno de los tres estados más atrasados de la OCDE, pero es el 15 economía mundial como principal exportador en América Latina, sin embargo dijo que uno de los principales problemas de México es que se quieren solucionar diversas problemáticas con el mismo modo.
Destacó que en los diversos panoramas debe entenderse que no puede haber una ciudad mayor a un millón de habitantes que no pague el agua, porque el subsidio que se les brinda puede destinarse a solucionar otras problemáticas.
Resaltó que todos los ciudadanos deben cumplir con lo que mandata la ley, se debe garantizar que todas las metrópolis funcionen sin un centavo de subsidio.
En el medio rural son sustentables. Las zonas rurales de menos de 1,500 y más de 500 habitantes, a los que hay que darles auxilio, pero todavía son rescatable a través de un subsidio, pero darles un empujón para que sean auto sustentables; las zonas rurales menores de 500 habitantes hay que entrar con todo.
“Si queremos resolver los problemas, tiene que ser a través de un traje a la medida, suena delicioso que todos tengan agua, pero con qué recursos”, argumentó el conferencista.
Concluyó diciendo que el subsector del agua es mejorable, sólo hay que empecinarse para hacer las cosas mejor, “tenemos que tener la voluntad para que se hagan bien las cosas, la voluntad política y la certeza de que cada ciudadano debe pagar por el agua”.
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