La justicia sigue ausente, afirmó Norma Ledezma Ortega, directora de Justicia para Nuestras Hijas, organización que cumplirá 21 años de creación, años en los que se le brinda acompañamiento a miles de víctimas de la violencia.
A lo largo de estos años, los eventos de conmemoración del Día Internacional de la Mujer son más arreglados, flores, posicionamientos, discursos incluso algunos hasta más emotivos, pero no pasa de eso. La violencia sigue presente y creciendo.
Norma señaló que los casos que dieron origen a la fundación de Justicia para Nuestras Hijas continúan en la impunidad, los casos de más de 20 años siguen durmiendo el sueño de los justos.
Los casos de 2001, 2002, 2003, y anteriores son solo carpetas, las familias de las víctimas de esos casos, tanto de mujeres desaparecidas como de feminicidios, siguen esperando la verdad y la justicia, tan anhelada y tan lejana.
Señaló que los impulsos que ha emprendido la sociedad civil organizada y colectivos lograron impulsar cambios, en fechas recientes la creación de 11 unidades de feminicidio en 11 municipios, lo que brinda un poco de esperanza ya que el presupuesto sigue siendo decifitario para la atención de un número creciente de casos.
“La justicia para justicia es una utopía”, afirma Norma Ledezma, madre de Paloma Angélica Escobar Ledezma, quien fue víctimas de desaparición y feminicidio.
Ante ello dijo que la organización no sólo aprueba sino que promueve las manifestaciones, dado que es un derecho el exponer los sentimientos y decir las verdades que oficialmente no salen a la luz.
Dijo que se promueve la demanda pública que es algo legítimo y genuino, de recordar y hacer conscientes de que muchas mujeres antecesoras lucharon y murieron en la causa.
“Es otro marzo más y mientras que Justicia para Nuestras Hijas exista seguiremos trabajando genuinamente el tema de la verdad y la justicia”.
