Las plagas y enfermedades pueden acabar con el 70 por ciento de la cosecha, por lo que productores agrícolas expusieron ante la Comisión de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Rural en el Senado de la República la afectación que sufrirán en caso de que se apruebe la prohibición de plaguicidas, ya que se haría inviable la producción de alimentos y con ello se encarecería el precio.
El ingeniero agrónomo Mauricio González Rivera, presidente de Unifrut, quien fue uno de los cinco productores que participaron en la exposición, señaló que la propuesta es contradictoria al Acuerdo de Apertura contra la Inflación y la Carestía (APECIC), por lo que propusieron que la iniciativa sea analizada e incluso se apruebe un parlamento abierto donde se escuche la voz de expertos y de la ciudadanía en general.
En la reunión participaron alrededor de 120 productores agrícolas y pecuarios de diversas asociaciones del país, de Chihuahua participó la Unifrut, el Sistema Producto Frijol y el Consejo Estatal Agropecuario, a quienes la senadora Nancy Guadalupe Sánchez Arredondo, presidente de la Comisión de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Rural en el Senado de la República, les abrió la puerta a fin de escuchar su punto de vista.
En la propuesta de la senadora Margarita Valdés, de la fracción de Morena y presidenta de la Comisión de Salud, busca la prohibición de plaguicidas que ayudan a mantener el estatus sanitario.
Son 125 ingredientes activos los que se busca prohibir y que sirven para combatir las plagas y enfermedades, lo que deja en la indefensión a los productores del campo.
El ingeniero González detalló que el herbicida Faena desde hace años lo quieren prohibir y buscar un reemplazo, pero no existe.
En la lista de los 125, el 5 por ciento pueden considerarse altamente tóxicos, por lo que los productores están de acuerdo en analizar la situación para irlos sacando del mercado. “No se trata de ser tajantes, aceptar o rechazar todo, sin embargo la terminología que ellos usan es que todos son tóxicos a pesar de que existen regulaciones a nivel mundial donde se clasifican los plaguicidas”.
Para registrar un producto de este tipo en México se tiene que hacer ante Cofepris y se lleva alrededor de cuatro a cinco años dicho registro debido a que se deben hacer pruebas como la efectividad biológica, que no sea dañino al medio ambiente. “Se les dijo que si los productos no se usan con el cuidado necesario podrían causar problemas, es como si los agrónomos quisiéramos prohibir las medicinas porque hay gente que se intoxica y se suicida con medicamentos, entonces se concluiría que los medicamentos son malos, lo que es ilógico porque cumplen con una función y si se usan de la manera adecuada benefician a la población”.
Se pronunció por analizar cuáles de estos productos pueden ser benéficos y capacitar a las personas que los usan, ello a través del Buen Uso y Manejo de Agroquímicos (BUMA), para evitar consecuencias adversas.
“Nosotros los productores somos los más interesados en que no se usen, cada aplicación tiene un costo y por esa razón se usa lo menos posible. Estos 125 ingredientes nos dejaría sin herramientas para producir alimentos”.
Ello significa que los productos se encarecerían y se afectaría el bolsillo de los ciudadanos.
Los productores del país, entre ellos de Chihuahua, esperarán a que los senadores aprueben en parlamento abierto.
Los productores chihuahuenses señalaron que hay esperanza porque la mayoría de los senadores se mostraron abiertos, a excepción de la senadora de Coahuila y de Tabasco Ovidio Salvador, quienes desconocen el proceso de producción de alimentos y los riesgos.
Solicitaron tomar en cuenta la ciencia y la tecnología para aprobar alguna iniciativa, que no se haga por ideología sino por el beneficio del pueblo, porque todos consumimos alimentos.
