Esta mañana en las instalaciones del Tec de Monterrey Campus Chihuahua, tuvo lugar el foro: “Migración: Contextos y Realidades”, a cargo de tres expertos precisamente en temas migratorios para ofrecer tanto sus perspectivas como experiencias al haber estado, al menos uno de ellos laborando en algún momento en dependencias federales en torno al fenómeno de desplazamiento de personas de un país a otro, en este caso en el contexto de las fronteras al sur y al norte de México.
Dichas pláticas a cargo de Leonor Figueroa Jacome, Ignacio Irazuzta Di Chiara y Gianinna Raquel están impulsadas también desde la Organización Internacional para las Migraciones, de la ONU, quienes además repartieron información de interés para personas migrantes que al ser difundidas pueden llegar a afectar de manera positiva al conocimiento de derechos para personas en esta situación.
Durante su experiencia en la antigua PGR, ahora Fiscalía General de la República, Leonor Figueroa Jacome se pronunció al respecto de las relaciones en política migratoria, sobre todo en cuanto a la relación Estados Unidos-México, señalando que la misma ha sido unilateral.
“Nosotros recibimos a las personas mientras ellos deciden qué hacer con ellos”, mencionó Figueroa en referencia a esa unilateralidad de parte de autoridades del país vecino y en como esas prácticas afectan en cuanto a la protección de los derechos de personas migrantes.
Las mismas se convierten en una situación que se contradice con el artículo primero constitucional, creando disonancia entre las normas y su aplicación, “Todas las autoridades, en el ámbito de sus competencias, tienen la obligación de promover, respetar, proteger y garantizar los derechos humanos de conformidad con los principios de universalidad, interdependencia, indivisibilidad y progresividad”, es lo que menciona el citado artículo primero y, por negligencia y desconocimiento o falta de capacitación.
“Existe una dualidad entre las normas y lo que sucede en la realidad”, apuntó la experta, señalando además que las víctimas son los migrantes desde el momento en que salen de sus lugares de origen empujadas por contextos violentos y desfavorables, dando a entender que mucha gente migra por cuestiones de violencia en distintos contextos y en ocasiones se les rechaza creando para ellos un ambiente todavía más desolador.
Denunció además una sociedad aporofóbica en Mexico, esto es que existe rechazo hacia la pobreza y hacia las personas en esta situación. Figueroa recordó el mensaje dejado en una barda de Veracruz que rezaba: “amigo migrante no te pares aquí, sigue tu camino”, por ello manifestó que en ocasiones se puede pensar que los migrantes solo van de paso y eso hace que se abuse de ellos, al no conocer sus derechos e ignorarlos como sujetos de derecho, tanto de parte de la sociedad como de las autoridades.
Ignacio Irazuzta Di Chiara, investigador también del Tecnológico de Monterrey, por su parte señaló acerca de la problemática de la desaparición forzada de migrantes, apuntando hacia las definiciones al respecto de este tema y cuestionando hacia los asistentes acerca del significado del mismo.
“Cuando hablamos de desaparición, hablamos de la separación entre el nombre y el cuerpo, y estas personas son orilladas a la indocumentación, que es la falta de correspondencia entre el cuerpo y el nombre”, manifestó Di Chiara.
La tercera de las exponentes fue la Doctora Gianinna Raquel, misma que se refirió a la problemática migrante desde el enfoque en menores de edad y las situaciones de niñas, niños y adolescentes sufren en tanto les es necesario migrar, apuntando así a una contradicción entre las ilusiones y las realidades que deberán enfrentar en su paso por el país, regularmente en dirección a los Estados Unidos.
Puso de ejemplo los dibujos de niños con los que se entrevistó para realizar una serie de estudios con menores que han atravesado por esta situación migratoria.
En los mismos, uno de ellos titulado “sueño”, un menor plasmó una situación que es de las más comunes en cuanto a la decisión, tanto de los padres como de algunos niños y adolescentes que viajan solos; en uno dibujaron a una persona en “el rancho” recibiendo dinero de los Estados Unidos y a alguien enviándolo, mientras está rodeado de billetes, como en señal de que “del otro lado” hay abundancia.
En otro dibujo se menciona la intención de “pasar sin ningún problema a Estados Unidos”, ahí se plasma la frontera, representada como un muro y un paisaje arbolado y lleno de edificios, en donde se encuentra el menor con su familia.
El “sueño americano” de los niños, se ve frustrado al toparse con las realidades que engloban las políticas migratorias, además de las cuestiones de violencia generadas por el crimen organizado.