CD. JUÁREZ.- Los recibos en los que más se ha notado un incremento en los montos que han tenido que pagar los restauranteros, en su proceso de regreso a la normalidad, es en el consumo de agua potable, independientemente de las altibajas que se presentan en lo que a la materia prima que utilizan se refiere, lo que ha determinado que no al menos 300 negocios del ramo no puedan abrir todavía.
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Martín García López, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos condimentados en Ciudad Juárez, dijo que en la ciudad existen alrededor de 5 mil negocios del ramo, algunos de los cuales han alcanzado apenas el 50 por ciento de su aforo, del 75 aprobado por las autoridades sanitarias.
El dirigente añadió que en el consumo de agua potable, el cobro más alto se generó en los meses anteriores, en los que llegaron a duplicarse, principalmente.
En algunos casos el recibo que regularmente era de mil 200 pesos llegó a los 3 mil y en otro casos de 3 mil a 4 mil, de acuerdo con el tamaño del negocio.
Indicó que paulatinamente se han regularizado los cobros, para llegar a los niveles normales, sin embargo, la situación sí ha afectado a los negocios que iniciaron con pérdidas fuertes, debido a que han mantenido sus gastos relacionados con los pagos de salarios y prestaciones.
Expresó su confianza en que pronto se cambie del semáforo amarillo al verde, pese a la preocupación que existe sobre un posible retroceso al naranja, lo que implicaría regresar a las restricciones en cuanto al número de clientes que se pueden atender al interior de los negocios.
Señaló que sigue el proceso de venta vía telefónica y de entrega a domicilio, pero en menor proporción que durante el periodo más fuerte de la pandemia.
Cabe indicar que los restaurantes o la venta de alimentos siempre ha estado entre las actividades esenciales, aunque con una serie de restricciones para mantener la sana distancia entre los comensales, así como el seguimiento de una serie de protocolos que se han reforzado con la reapertura de los negocios.
Explicó que las acciones de sanitización en las instalaciones se mantienen tanto en lo que es la recepción y atención a los clientes, como los que deben seguir empleados y la forma de cobro, entre otros.
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