La problemática por conflictos que involucra a estudiantes de una escuela secundaria en la ciudad de Cuauhtémoc, llegó a grado tal de existir la necesidad de la intervención de la Dirección de Seguridad Pública Municipal, quien, a través del área de Justicia Cívica, realizó una audiencia pública, para atender el caso de un conflicto por riña entre menores en el entorno escolar.
En detalle, la dependencia municipal informó que fue en las instalaciones de los juzgados cívicos donde se realizó la audiencia, toda vez que el caso fue atendido de forma directa por las agentes preventivas del PASMI (Programa de Prevención al Abuso Sexual y Maltrato Infantil), en un plantel educativo de la comunidad, del cual se reservan datos de los involucrados por apego a la Ley de Protección de Datos, además de que, por tratarse de menores de edad, se respeta su privacidad.
Las agentes fueron informadas sobre la problemática de riñas en el exterior de un plantel educativo de nivel secundaria, en donde estaban involucrados ocho menores de edad que se presentaron ante la juzgadora, acompañados por sus padres y madres o bien por sus representantes legales.
Destaca que se presentaron certificados de salud elaborados por el médico de guardia de la Policía Municipal, así como también el tamizaje psicológico para determinar su bienestar emocional, a cada uno de los presentados.
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Luego de escuchar cómo sucedieron los hechos, quedó plenamente acreditada la responsabilidad de cada uno de los involucrados.
En este caso se informó que los menores y sus padres, deberán atender terapia grupal por parte de los especialistas en psicología, servicio que se brindará de forma gratuita por parte de los profesionales con que cuenta el Juzgado Cívico.
Seguridad Pública Municipal resaltó que este tipo de juicios buscan encontrar el origen de las problemáticas que se presentan en la comunidad, más que un castigo por parte de las autoridades, se pretende corregir las conductas negativas mediante la intervención de especialistas que ayudan a las personas a superar aquellas situaciones que los orillan a tener conductas inadecuadas, que de no ser atendidas pueden escalar a delito con el paso del tiempo.
Con este ejercicio, la autoridad local promueve las posibles soluciones a conflictos del fuero común que se registran en distintos sectores del municipio, con lo cual se establece una mejor forma de contrarrestar problemas que pueden convertirse en delitos, además de fomentar la armonía entre la sociedad cuauhtemense.
