Fueron despedidas cuatro de las ocho maestras de la alberca Santo Niño sin previo aviso. A decir de las ahora extrabajadoras, ayer por la tarde acudieron a la oficina por su cheque quincenal, pero en ese momento les notificaron que prescindirían de sus servicios sin asegurarles su regreso cuando la alberca abra sus puertas dentro de tres meses por mantenimiento.
El cierre por mantenimiento de la alberca Santo Niño fue anunciado a los maestros y usuarios el pasado 12 de junio, cuando de primera instancia se informó que la alberca presentaba filtraciones que necesitaban ser atendidas de urgencia; el traslado de los usuarios hacia la Alberca Olímpica y la condicionante del empleo de los maestros respecto al llenado de sus grupos, “a los maestros les dijeron que los iban a liquidar, entonces por mantenimiento no tiene sentido, además no nos dicen la planeación, nadie se ha acercado con nosotros para aclarar la fecha en la que podemos regresar”, comentó Janeth Portillo, usuaria de la alberca Santo Niño, el 13 de junio.
Sin embargo, al día siguiente, el Instituto Chihuahuense del Deporte y Cultura Física (ICHD) anunció, vía medios de comunicación, que el personal que laboraba en la alberca Santo Niño sería trasladado a la Alberca Olímpica, en la que días después se desempeñaron como apoyos hasta que sus grupos se regularizaron.
“El ICHD no ordenó el despido de ningún entrenador o servidor público de la alberca Santo Niño, por lo contrario, la instrucción fue utilizar a la mayor cantidad de personal para seguir atendiendo y prestando sus servicios a los usuarios, aunque este tema todavía sigue en análisis”, manifestó el titular del deporte en el estado, Juan Pedro Santa Rosa, el pasado 15 de junio.
De acuerdo con la maestra de natación Edith, ayer por la tarde acudieron a las oficinas correspondientes para recibir el cheque por su trabajo de la quincena, sin embargo, ya en el lugar, el trabajador de recursos humanos les comentó que ya no serían requeridas: “Prácticamente nos dijeron que muchas gracias, que tal vez nos hablen cuando la alberca reabra sus puertas en tres meses, porque hasta ese tiempo nos van a necesitar y que en total somos cuatro maestras las que vamos a estar fuera”, comentó Edith.
Asimismo, precisó que no firmaron carta de renuncia ni recibieron el pago por liquidación, por lo que a ellas respecta seguirán presentándose a trabajar hasta obtener una respuesta aclaratoria y concisa por parte de los encargados: “La licenciada Norma Marcela García, directora de la Alberca Olímpica, no nos ha querido dar la cara. Acudimos a visitarla para que nos brindara una explicación, pero se fue misteriosamente y no responde las llamadas”, declaró Edith.
“Anteriormente se había manejado que si nuestros grupos no se llenaban, nos acomodarían en otro lugar. Pero como siempre, los de arriba nunca cumplen”, finalizó Edith, maestra de natación.