Ante las medidas preventivas que se han adoptado para evitar la propagación del COVID-19, el Instituto Chihuahuense de las Mujeres hace un llamado a las autoridades de los tres niveles de gobierno y de la iniciativa privada, para analizar esta crisis sanitaria con enfoque de género, tomando en cuenta que gran parte de los cuidados recaen en las mujeres, lo cual implica más jornadas de trabajo no remunerado.
La directora del Ichmujeres, Emma Saldaña Lobera, refirió también que ONU Mujeres ha señalado la importancia de eliminar las barreras económicas, culturales, estructurales y de género que enfrentan las mujeres al buscar acceder a los servicios de salud, pues cuando hay sobresaturación en los hospitales, son ellas junto a sus hijas e hijos quienes están en riesgo de exposición.
Saldaña Lobera recomendó, tras la suspensión de labores en los centros escolares, que las mujeres trabajadoras tengan la posibilidad de realizar el trabajo desde casa; sobre todo aquellas en estado de gravidez.
Para quienes por la naturaleza de su labor no puedan ausentarse de sus centros de trabajo, la funcionaria estatal aconsejó a los sectores público y privado, que flexibilicen sus horarios para permitir que hombres y mujeres puedan asumir de manera equitativa las labores de cuidado en el hogar.
También exhortó a empleadoras y empleadores a no afectar los salarios de las trabajadoras que deban ausentarse, como es el caso de quienes se dedican al trabajo del hogar, mayores de 60 años y a las que pertenezcan a un grupo en situación de vulnerabilidad.
La directora Saldaña reiteró que, en esta contingencia, es fundamental no agravar las desigualdades de género: “los brotes de enfermedades afectan de manera diferente a hombres y mujeres, debemos entenderlo para desarrollar políticas de intervención equitativas e igualitarias”, señaló.
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