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Gerardo A.C. el Jerry fue capturado en 2018 por el delito de homicidio y sentenciado a 20 años de cárcel, por lo cual debería haber abandonado el Cereso número 1 a finales del año 2038, sin embargo, a través de un amparo que resolvió un magistrado del Tribunal Superior de Justicia, le recortó la pena a dos años y quedó en libertad a inicios del 2020.
Esta liberación prematura ha generado el incremento de algunos delitos en la ciudad de Chihuahua, principalmente el homicidio, el cual los investigadores lo relacionan a una especie de “venganza” que ha comenzado a raíz de la muerte de sus dos hermanos Francisco y Manuel, este último líder de la banda criminal apodada “Los Arzola”.
En el año 2018, la Fiscalía General del Estado detuvo a Gerardo, junto a Pedro L.P y Carlos Alberto H.A. el Tatín, por haber participado en el homicidio de una persona, incluso al momento de la detención intentaron hacer una llamada con un “comandante” para que los dejaran en libertad, sin embargo no se concedió y fueron puestos a disposición.
Tras permanecer en prisión, los abogados del mismo interpusieron un amparo indirecto, que fue recibido por el magistrado Rafael Julián Quintana Ruiz, quien determinó que Gerardo no había tenido participación en los hechos, por lo que decretó su libertad inmediata a inicios del año 2020, según resolvió a finales de octubre de 2019.
Seguimiento de las estrategias de investigación apuntan que por meses estuvo reclutando a varios integrantes del grupo criminal, y han desatado una ruptura interna por quienes intentaron tomar el territorio de Los Arzola, lo cual ha terminado con un gran número de homicidios en la capital.
También las autoridades de seguridad cuentan con información de que se encuentra “cobrando” venganza por la muerte de Francisco y Manuel, quienes en el año 2018 fueron privados de la vida, el primero de ellos en la colonia San Felipe y el segundo en las inmediaciones de un centro comercial ubicado en el periférico de la Juventud.
Por años, las autoridades habían identificado a Manuel, don Meny, como el líder criminal de Los Arzola, quienes habían viajado de Durango a Chihuahua para incursionar en el “mundo” del narcomenudeo y quienes ya habían sido nombrados como “los reyes del cristal” por las grandes cantidades de esa droga que distribuían.
En el año 2018, la Fiscalía General del Estado anunció a través de un comunicado que Jerry había participado como coautor del crimen en contra de Carlos Mariscal Piña, por lo cual fue sentenciado a 20 años de prisión por haber participado en los hechos, además de que lo identificaron como un líder criminal en la capital.
Durante las audiencias llevadas a cabo en el desahogo de pruebas, agentes del Ministerio Público acreditaron que el 17 de mayo del 2017, la víctima de nombre Carlos Mariscal Piña se encontraba en la avenida Teófilo Borunda e Independencia, a bordo de una camioneta Dodge, Chrysler, Voyager, color guinda.
Tras el inmediato reporte al número de emergencia 911 se obtuvo información, características del sicario, vestimenta e incluso las placas del vehículo en el que huyó, lo que fue determinante para ubicarlos y detenerlos en cuestión de minutos.
Las distintas corporaciones de seguridad implementaron un operativo coordinado y simultáneo para localizar a los responsables, quienes fueron capturados por elementos de la Dirección de Seguridad Pública Municipal en la intersección de la calle Guatemala y avenida Francisco Villa.
Al momento de detener el vehículo en el que viajaban y ser detenidos, uno de los agresores intentó convencer a uno de los agentes de recibir una llamada de un supuesto comandante o de lo contrario atentarían en su contra, por lo que, al ver el peligro del hecho, se solicitaron refuerzos para escoltarlos hasta las instalaciones de la Comandancia Norte.
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