/ martes 20 de diciembre de 2022

Avanzamos siempre, avanzamos juntos 

Por: Óscar Barraza


2022 ha sido un año que nos regaló la oportunidad de sacar lo mejor de nosotros mismos, puso a prueba nuestra capacidad de reponernos y salir adelante después de la tormenta.

Como especie no la hemos tenido fácil, tampoco como país, tampoco como estado. Nos han golpeado los criminales, los políticos corruptos y hasta una pandemia.

Pese a todo y contra todo pronóstico, seguimos de pie, pero curiosamente, más fuertes.

En Namiquipa hemos sido propulsores de una dinámica de avance continuo, en donde nos movemos todos los días con mayor agilidad e incorporamos mayor habilidad para salir adelante.

Somos una tierra que históricamente fue olvidada por propios y extraños, pero las y los namiquipenses siempre hemos sabido cómo avanzar. Avanzamos firme y avanzamos siempre.

Particularmente en los últimos cuatro años hemos desterrado la indolencia de los “no se puede” y los cambiamos por esfuerzos conjuntos que nos hacen resolver; dejamos de buscar culpables para entonces hacernos responsables de lo que pasa en nuestro municipio.

No siempre otros gobiernos hicieron lo que les tocaba, pero aún en su omisión nosotros salimos adelante. También nos replegamos y nos aislamos por sobrevivencia y cuando llegó el momento, salimos y cambiamos las reglas para reconstruirnos más rápido.

En Namiquipa, en cuatro años construimos más plazas, parques, calles, caminos, viviendas, espacios públicos, presones, aulas, que lo que se había hecho en al menos veinte años.

Juntos, no lo hizo nuestro gobierno solo, sino todas y todos los ciudadanos, cambiamos la realidad de miles de familias, creamos oportunidades para miles de sueños que se habían mantenido guardados, les dimos otro rostro a las comunidades, construimos evidencia de todo lo que sí es posible y les regresamos la esperanza a la nuevas generaciones.

Estamos todas y todos muy orgullosos de lo que juntos logramos, pero estamos totalmente claros de que nunca es suficiente, y no porque no reconozcamos lo que se hace y lo que se avanza, sino porque todo se mueve, todo cambia, todo evoluciona y con ello nacen las nuevas exigencias, nuevas necesidades, nuevos problemas y se requieren, por ende, nuevas soluciones.

Vivimos en un mundo que se reinventa a cada segundo y no le tenemos miedo, porque así somos aquí, nos reinventamos para enfrentar el frío, para combatir la sequía, para vencer las plagas y para no rajarnos ante nada.

Cerramos el año viendo con admiración la forma en la que los chihuahuenses nos levantamos, nos sacudimos el polvo y avanzamos determinados. Sabemos y sentimos en el corazón, que esa grandeza no nos es ajena a las mujeres y a los hombres de Namiquipa, esa es la grandeza que nos hace avanzar y ver de frente los cambios.

Entendemos que los cambios son siempre tan buenos como la valentía con la que los asumamos… Bienvenido el cambio de año, bienvenido el cambio de paradigmas y bienvenida la grandeza que ocurre después del cambio.


En el 2023, sigamos avanzando.

Por: Óscar Barraza


2022 ha sido un año que nos regaló la oportunidad de sacar lo mejor de nosotros mismos, puso a prueba nuestra capacidad de reponernos y salir adelante después de la tormenta.

Como especie no la hemos tenido fácil, tampoco como país, tampoco como estado. Nos han golpeado los criminales, los políticos corruptos y hasta una pandemia.

Pese a todo y contra todo pronóstico, seguimos de pie, pero curiosamente, más fuertes.

En Namiquipa hemos sido propulsores de una dinámica de avance continuo, en donde nos movemos todos los días con mayor agilidad e incorporamos mayor habilidad para salir adelante.

Somos una tierra que históricamente fue olvidada por propios y extraños, pero las y los namiquipenses siempre hemos sabido cómo avanzar. Avanzamos firme y avanzamos siempre.

Particularmente en los últimos cuatro años hemos desterrado la indolencia de los “no se puede” y los cambiamos por esfuerzos conjuntos que nos hacen resolver; dejamos de buscar culpables para entonces hacernos responsables de lo que pasa en nuestro municipio.

No siempre otros gobiernos hicieron lo que les tocaba, pero aún en su omisión nosotros salimos adelante. También nos replegamos y nos aislamos por sobrevivencia y cuando llegó el momento, salimos y cambiamos las reglas para reconstruirnos más rápido.

En Namiquipa, en cuatro años construimos más plazas, parques, calles, caminos, viviendas, espacios públicos, presones, aulas, que lo que se había hecho en al menos veinte años.

Juntos, no lo hizo nuestro gobierno solo, sino todas y todos los ciudadanos, cambiamos la realidad de miles de familias, creamos oportunidades para miles de sueños que se habían mantenido guardados, les dimos otro rostro a las comunidades, construimos evidencia de todo lo que sí es posible y les regresamos la esperanza a la nuevas generaciones.

Estamos todas y todos muy orgullosos de lo que juntos logramos, pero estamos totalmente claros de que nunca es suficiente, y no porque no reconozcamos lo que se hace y lo que se avanza, sino porque todo se mueve, todo cambia, todo evoluciona y con ello nacen las nuevas exigencias, nuevas necesidades, nuevos problemas y se requieren, por ende, nuevas soluciones.

Vivimos en un mundo que se reinventa a cada segundo y no le tenemos miedo, porque así somos aquí, nos reinventamos para enfrentar el frío, para combatir la sequía, para vencer las plagas y para no rajarnos ante nada.

Cerramos el año viendo con admiración la forma en la que los chihuahuenses nos levantamos, nos sacudimos el polvo y avanzamos determinados. Sabemos y sentimos en el corazón, que esa grandeza no nos es ajena a las mujeres y a los hombres de Namiquipa, esa es la grandeza que nos hace avanzar y ver de frente los cambios.

Entendemos que los cambios son siempre tan buenos como la valentía con la que los asumamos… Bienvenido el cambio de año, bienvenido el cambio de paradigmas y bienvenida la grandeza que ocurre después del cambio.


En el 2023, sigamos avanzando.