/ miércoles 29 de abril de 2020

Los grupos vulnerables y el Covid-19


“La capacidad de sobrevivir a la pandemia es mucho menos probable para las personas en situación de pobreza y pobreza extrema, así como otros grupos históricamente discriminados”: Secretario general de la Organización de los Estados Americanos.


La Organización de los Estados Americanos en el mes de abril de este año 2020 publicó una Guía Práctica de Respuestas Inclusivas y con Enfoque de Derechos ante el Covid-19 en las Américas.


El propósito de este documento es que la ciudadanía más excluida de nuestras sociedades no se quede fuera, ya que los grupos en situación de vulnerabilidad encuentran mayores barreras para acceder y beneficiarse a políticas de prevención, mitigación y atención en salud, debido a las barreras estructurales de desigualdad.


Esta guía establece las obligaciones a los Estados miembros de la Organización, estos instrumentos marcan la pauta para el diseño de las respuestas de política pública con enfoque de derechos humanos señalando que todas las personas sin distinción tengan conocimiento de la gravedad de la situación y de las medidas de prevención.


Los grupos de mayor riesgo desde mi perspectiva son las personas de escasos recursos, pero que además se encuentran en un grupo vulnerable como lo son los niños, los adultos mayores y las personas con discapacidad.


Las personas mayores son uno de los grupos con más riesgo de contagiarse por la edad y el incremento de otras patologías. Las personas con discapacidad tienen ausencia de mecanismos de accesibilidad debido a las barreras que les rodean. Ante esta pandemia lavarse las manos constantemente, evitar tocar superficies, o mantener distancia social constituye una enorme barrera para las personas en situación de discapacidad para ejecutar por sí mismas las recomendaciones de prevención.


Las medidas preventivas que dictan las autoridades deben de ser traducidas a medios visuales de lengua de señas y subtítulos para que ellos cuenten con el conocimiento para cuidar su salud.


El Covid-19 representa un desafío sin precedentes para los Estados y una amenaza para toda la población del mundo, por ello las autoridades deben de tomar en cuenta la situación particular de vulnerabilidad en que se encuentran las personas en pobreza extrema, ya que para ellos ejecutar las medidas de prevención es mucho más complicado.


Las políticas que implementen los Estados ante el Covid-19 deben ser “interseccionales”, es decir con conciencia para abordar las discriminaciones en que se encuentran los grupos vulnerables.

¡Me siento orgullosa de ser hija de estas hermosas tierras norteñas!


“La capacidad de sobrevivir a la pandemia es mucho menos probable para las personas en situación de pobreza y pobreza extrema, así como otros grupos históricamente discriminados”: Secretario general de la Organización de los Estados Americanos.


La Organización de los Estados Americanos en el mes de abril de este año 2020 publicó una Guía Práctica de Respuestas Inclusivas y con Enfoque de Derechos ante el Covid-19 en las Américas.


El propósito de este documento es que la ciudadanía más excluida de nuestras sociedades no se quede fuera, ya que los grupos en situación de vulnerabilidad encuentran mayores barreras para acceder y beneficiarse a políticas de prevención, mitigación y atención en salud, debido a las barreras estructurales de desigualdad.


Esta guía establece las obligaciones a los Estados miembros de la Organización, estos instrumentos marcan la pauta para el diseño de las respuestas de política pública con enfoque de derechos humanos señalando que todas las personas sin distinción tengan conocimiento de la gravedad de la situación y de las medidas de prevención.


Los grupos de mayor riesgo desde mi perspectiva son las personas de escasos recursos, pero que además se encuentran en un grupo vulnerable como lo son los niños, los adultos mayores y las personas con discapacidad.


Las personas mayores son uno de los grupos con más riesgo de contagiarse por la edad y el incremento de otras patologías. Las personas con discapacidad tienen ausencia de mecanismos de accesibilidad debido a las barreras que les rodean. Ante esta pandemia lavarse las manos constantemente, evitar tocar superficies, o mantener distancia social constituye una enorme barrera para las personas en situación de discapacidad para ejecutar por sí mismas las recomendaciones de prevención.


Las medidas preventivas que dictan las autoridades deben de ser traducidas a medios visuales de lengua de señas y subtítulos para que ellos cuenten con el conocimiento para cuidar su salud.


El Covid-19 representa un desafío sin precedentes para los Estados y una amenaza para toda la población del mundo, por ello las autoridades deben de tomar en cuenta la situación particular de vulnerabilidad en que se encuentran las personas en pobreza extrema, ya que para ellos ejecutar las medidas de prevención es mucho más complicado.


Las políticas que implementen los Estados ante el Covid-19 deben ser “interseccionales”, es decir con conciencia para abordar las discriminaciones en que se encuentran los grupos vulnerables.

¡Me siento orgullosa de ser hija de estas hermosas tierras norteñas!