Un tirano, de acuerdo al jesuita Juan de Mariana, “se apropia de los bienes de los individuos y los malgasta, poseído como está por los innobles vicios de la codicia, la avaricia, la crueldad y el fraude (…) Los tiranos, en verdad, intentan dañar y arruinar a todos, pero dirigen su ataque especialmente contra los ricos y hombres honrados en todo el reino. Consideran lo bueno más sospechoso que lo malo y la virtud que les falta les es más formidable (…) Expulsan a los mejores hombres de la comunidad bajo el principio de que quien sea exaltado en el reino debe ser derribado (…)”
“Exprimen a todo el resto, de forma que no puedan unirse, demandándoles nuevos tributos diariamente, promoviendo peleas entre los ciudadanos y uniendo una guerra a otra. Construyen grandes obras a costa y sufrimiento de los ciudadanos. (…) El tirano teme necesariamente que quienes aterroriza y mantiene como esclavos intenten derrocarle (…) Así que prohíbe que los ciudadanos se reúnan, las asambleas y la discusión común de los asuntos de la comunidad, quitándoles mediante métodos de policía secreta la oportunidad de hablar y escuchar libremente”
¿No parece extrañamente familiar?: “Se apropia de los bienes de los individuos y los malgasta”, recuerda a los pagos multimillonarios por la cancelación del Aeropuerto de Texcoco. “Intentan dañar y arruinar a todos, pero dirigen su ataque especialmente contra los ricos y hombres honrados en todo el reino”, nos recuerda a los títulos con los que se etiqueta a las personas o grupos que no están de acuerdo con la política oficial: conservadores, “fifís”, aspiracionistas. “Consideran lo bueno más sospechoso que lo malo”, porque puede plagiarse una tesis, pero nunca dejar de ser aliados.
“Expulsan a los mejores hombres de la comunidad bajo el principio de que quien sea exaltado en el reino debe ser derribado…”.Ni qué hablar de los numerosos cambios y enroques dentro del equipo del presidente de México. ”Así que prohíbe que los ciudadanos se reúnan, las asambleas y la discusión común de los asuntos de la comunidad”. ¿No le molestó que el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Consejo Mexicano de Negocios entablaran pláticas para obtener financiamiento para PyMES?..”. ¿Quién controla al ejército que espía a periodistas y funcionarios públicos?
Recuerden que el tirano prohíbe que los ciudadanos se reúnan “mediante métodos de policía secreta la oportunidad de hablar y escuchar libremente, de forma que ni siquiera se les permite quejarse libremente”. ¿Cuánto tardará un mandatario con estos rasgos de personalidad en comerse, primero a sus aliados y después al pueblo que dice proteger, tal como el dios Cronos devoraba a sus hijos? Un rey puede ser tan perverso contra el bien común y los pactos hechos con el pueblo que se decida cancelar los pactos, deponer al rey y no obedecer (Defensio fidei 6,6,11). Francisco Suárez.
No deleguemos nuestra libertad como ciudadanos a cambio de las promesas con las que el burócrata sólo busca aliviar la ansiedad como una regresión a la tribu, en lugar de ejercer una acción política de cara al futuro que desearíamos para nuestros hijos, de lo contrario, el tirano buscará realizar “grandes obras a costa y sufrimiento de los ciudadanos”
Lic. en Administración Financiera, Supervisor de Facturación Sitio Mina Dolores en Grupo Prosesa
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