Los altos índices de sobrepeso y obesidad, sumados a los estándares de belleza impuestos por la sociedad, han generado un creciente consumo de productos "engaño". Estos prometen lograr la silueta perfecta en poco tiempo y sin más esfuerzo que su simple consumo.
Los "suplementos" para bajar de peso se comercializan principalmente a través de redes sociales, grupos privados y redes de amigos que comparten información sobre estos productos, los cuales generalmente son entregados a domicilio, dificultando su decomiso por parte de las autoridades sanitarias.
Además, se encuentran disponibles en páginas de comercios naturistas y en tiendas físicas de herbolarios y naturistas, donde las características del producto no se publicitan detalladamente. No obstante, al establecer contacto con el vendedor, se proporciona información sobre sus "propiedades".
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En muchos casos, los vendedores de estos productos "engaño" comparten información detallada sobre el contenido, así como fotografías del "antes y después", ya sea de ellos mismos o de otras personas que afirman haber perdido peso tras consumir los suplementos.
Estos productos se presentan en diversas formas, como tabletas, cápsulas, polvo, líquido, sobres de té e incluso inyecciones. En el mejor de los casos, se ofrecen como un "complemento" a una dieta balanceada y ejercicio.
Sin embargo, en otros casos, los productos "engaño" cumplen a la perfección su nombre, ya que garantizan resultados extraordinarios, como la pérdida de entre 5 y 12 kilos al mes con el simple consumo de una pastilla. Para casos más complejos, se ofrecen versiones "strong" o en combo, destinadas a personas con obesidad que buscan perder de 13 a 25 kilos o incluso más.
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Entre estos productos, se destacan las tabletas "chupa grasa", "quema grasa" o "chupa panza", que tienen un costo promedio de 250 pesos. También se puede conseguir con facilidad la "semilla del Brasil", o cápsulas de tejocote, cuyo precio ronda entre 280 y hasta 400 pesos .
Los llamados "quemadores" preentreno, o las pastillas chinas que dicen contener "hierbas de la medicina tradicional china", pueden conseguirse entre 500 y hasta 900 pesos.
Otros productos, se ofrecen bajo nombres sugerentes, como los "peso pluma", que tienen un costo desde 300 hasta 600 pesos, ya sea en tabletas, cápsulas, tes, o en "combo", para quemar grasa corporal general, grasa localizada, suprimir el apetito y otros beneficios extra.
"Este medicamento es responsabilidad de quien lo consume": La etiqueta que dificulta el aseguramiento de productos milagro
"Tanto la autoridad federal sanitaria como nosotros nos enfrentamos a un tema bastante complejo. Aunque es cierto que en muchos casos los productos naturistas representan un riesgo para la salud, esto solo se puede confirmar si alguien lo ha presenciado y lo denuncia", afirmó Luis Carlos Tarín, titular de la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Coespris).
Tarín explicó que muchos de estos productos llevan una leyenda que indica: "Este producto no es un medicamento, y su consumo es responsabilidad de quien lo consume". Esta etiqueta dificulta a la autoridad sanitaria proceder con el aseguramiento de productos o la clausura de los lugares donde se ofertan.
El titular de Coespris destacó que en estos casos, como autoridad sanitaria, su labor consiste en informar a la población sobre el riesgo que representan este tipo de productos. Lamentablemente, estos productos suelen ser consumidos a través de recomendaciones de conocidos, amigos o personas que ya los han probado y los consideran efectivos.
"La recomendación se va transmitiendo de boca en boca: 'Yo tomé el chupa grasa, me funcionó, así que te va a funcionar a ti'", es decir, sin la intervención de un nutriólogo o médico.
Cabe mencionar, que la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios, realizó 6 mil 400 inspecciones sanitarias a establecimientos durante 2023, de los cuales, 410 fueron suspendidos.
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Debido a que se comprobó que hubo violaciones a la Ley General de Salud y sus reglamentos, se impusieron 130 sanciones administrativas, con multas por 448 mil 960 pesos.
Además, se atendieron 561 denuncias sanitarias relacionadas con la higiene, preparación, técnica y atención adecuada por parte de prestadores de servicios e insumos para la salud. Aquí se incluyeron consultorios médicos, clínicas de belleza, farmacias, tiendas naturistas, restaurantes, tiendas de autoservicio, entre otras.
Debido a que estos productos se consumen por recomendación de "boca en boca", el titular de la Coespris advirtió que pueden significar un riesgo para la salud por lo que se debe evitar la adquisición y consumo de los mismos.
Puntualizó que lo más recomendable, siempre, es que las personas que desean atender el sobrepeso o la obesidad, se atiendan a través de médicos o personal de salud que esté verdaderamente capacitado para atender esta condición.
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