Jesús Eduardo R. G., fue sentenciado a 13 años y 7 meses de prisión por el delito de homicidio simple en contra de María Araly Quiñónez Aranda, de 33 años de edad.
La Fiscalía la Especializada en Atención a Mujeres Víctimas del Delito por Razones de Género (FEM) se prepara para apelar la sentencia emitida en la audiencia de individualización de sanciones del fallo condenatorio y reparación del daño.
María Araly Quiñónez Aranda, de 33 años, fue encontrada sin vida el 3 de abril de 2020 dentro de su departamento ubicado en la zona centro de la Ciudad de Chihuahua.
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Jesús Eduardo, su expareja, fue vinculado a proceso en septiembre del 2021 por el delito de feminicidio y la semana pasada uno de los tres jueces del tribunal de enjuiciamiento desestimó las pruebas y consideró que no se trataba de un homicidio por razón de género.
Las investigaciones de la Unidad de Investigación de Feminicidios recabó la suficiente evidencia científica y documental como prueba de que Jesús Eduardo ingresó al departamento ubicado en la colonia Santa Rosa para privarla de la vida, ello aprovechándose de la confianza que la víctima le tenía.
Araly fue estrangulada y aunque se obtuvieron rastros biológicos de Jesús Eduardo, todas esas pruebas no fueron suficientes para el juez Arámbula Delgado, quien consideró que la violencia física y económica que sufrió a manos de Jesús Eduardo no era un agravante.
Este miércoles en Décimo Novena Sala de Audiencias en el Cereso Estatal 1 en Aquiles Serdán se realizó el juicio 111/2022 de la causa 2336/2021 a partir de las 13:00 horas y culminó alrededor de las 20:00 horas.
El juez Lucero Anaid Moreno Navarrete sentenció a Jesús Eduardo a 13 años con 7 meses de prisión.
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