Con profunda pena la comunidad chihuahuense ha despedido al doctor Guillermo Hernández Guerra, quien perdió la batalla contra el Covid-19, y generando una ola de publicaciones para darle la despedida al médico, deportista, amigo, y entrañable esposo María Dolores, padre de Guillermo, Adriana y Érika; y abuelo de seis nietos.
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Luego de haber sido diagnosticado por Covid-19, ingresó al Hospital Palmore el pasado 9 de diciembre, y posteriormente al Hospital Star Médica, logrando ser egresado. Desafortunadamente, fue atacado por una bacteria, de las llamadas infección nosocomial, lo que complicó su condición.
Es recordado como un entusiasta deportista, quien participaba en maratones y destacado softbolista, que entrenaba disciplinadamente los miércoles en los Campos Bugarini, donde “tiraba bola”, y mostraba su destreza como pitcher.
Colaboró en diversas instituciones médicas y sistemas de Salud, siendo el más reciente en el Instituto Municipal de Pensiones, donde hizo frente a la pandemia.
“Conocimos a mi papá, conocimos al amigo, hermano, padre, esposo, suegro, primo, tío, abuelo y nos dejó mucho. Hoy podemos decir que se nos fue un grande y que dejó un gran legado. Lo podemos ver en las muestras de cariño, en los miles de mensajes, en la cantidad de personas que se unieron como comunidad a pedir el milagro, a pedir por su salud.
Lo veíamos día a día, nosotros, sus hijos y esposa, rezar diariamente a Dios para que actuara ante las injusticias. Pero no solo eso, nos tocó verlo también luchar por evitarlas; nos tocó verlo enojarse cuando se veían vulnerados los derechos de algunas de sus pacientes para dar paso a otras para beneficio de algunos. Que "le faltaba entender cómo era la cosa", le llegaron a decir, más lo que afirmamos aquellos que lo conocimos es que, más bien, abundaba en valores y en coraje para defenderlos, no le faltaba entender nada. Le gustaba ayudar sin esperar que le ayudaran. Así era mi papá, así fue mi papá. Nos dejó ese ejemplo mi padre, y el reto grande de seguirlo en nuestras labores diarias, de hacer las cosas bien incluso cuando nadie está mirando”, expresó su hijo Guillermo, en su despedida religiosa.
Descanse en paz, Doctor Guillermo Hernández Guerra.
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