CUAUHTÉMOC, Chih.- La muerte de la conductora de televisión y radio, Griselda Ramos, sometida a una cirugía estética en una clínica de esta ciudad, pone una alerta en algunos de los procedimientos de belleza que se realizan en esta población que se practican, incluso en casas particulares o se costean mediante tandas y están a la vista en páginas de redes sociales, donde se publicitan sin restricción alguna.
Apenas el pasado 19 de abril, la comunicadora habría tenido una entrevista en el estudio con el especialista hoy detenido, quien detalló los procedimientos de belleza que realizaba. De acuerdo con amigos de la periodista, ella les habría comentado que venía a Cuauhtémoc porque en la clínica San José le rentaban más barato el quirófano.
Ya por la tarde, la familia sólo recibió una llamada de alguien no identificado quien sólo les dijo que la mujer había fallecido tras la operación y entonces debieron trasladarse hasta esta comunidad para encontrar el cuerpo de Griselda en el Servicio Médico Forense.
Elementos de la Agencia Estatal de Investigación entrevistaron al doctor Hugo Erick, quien practicó la cirugía, quien dijo que la operación se realizó sin ningún contratiempo.
Refirió que una vez que concluyeron la intervención quirúrgica le pidieron a la paciente que se cambiara de camilla, momento en el cual ella les expresó que se sentía mareada y cayó en un paro cardiorrespiratorio.
Indicó que de inmediato aplicaron el protocolo de reanimación cardiopulmonar avanzada, sin resultado positivo.
Griselda era madre de 4 hijos, fue muy querida por sus compañeros de trabajo por su entusiasmo y dedicación, quienes lamentaron públicamente el deceso de la periodista.