/ viernes 8 de marzo de 2024

México, el que más gasto destina a pagar deuda

México es el país que destina un mayor porcentaje de su gasto público al pago de intereses de la deuda dentro de los países de la OCDE, en 2021 estuvo pagando 14 de cada 100 pesos al servicio de la deuda lo que lo colocó en el primer lugar de la lista, por arriba de países en desarrollo y desarrollados.

Tomemos en cuenta que un país como Japón con una deuda pública mayor al 200% de su Producto Interno Bruto (PIB) más, sin embargo, destina menos recursos a su pago de intereses de la deuda que nosotros. El alto pago de intereses sobre nuestra deuda está presionando cada vez más el presupuesto de egresos federal, lo que representa un costo de oportunidad para otras áreas, como pueden ser salud, educación e inversión pública, seguridad pública, etc.

Algunos ejemplos relevantes de países que se encuentran detrás de México en cuanto al porcentaje de su gasto público a cubrir el pago de la deuda, son: Colombia, con 10.3%; Islandia, con 10.2%; Estados Unidos, con 7.9%; Israel, con 7.2%; y Japón, con 6.2 %. Al cierre del 2023, el costo financiero de México llegó a su nivel más alto en la historia, al absorber recursos por 1.04 billones de pesos, lo que representó 3.3% del PIB, esto como consecuencia de mayores tasas de interés tanto en México como en otros países.

También, el año pasado los recursos que se destinaron al costo financiero representaron 97% de los ingresos petroleros que se obtuvieron durante el año.

Las finanzas públicas del año pasado no respetan la llamada “regla de oro”, que estipula, que el gasto en inversión física sea mayor o igual a la deuda que contrata el gobierno para el año en curso, lo que no se cumple por este gobierno.

Lo que tenemos es que, al cierre del 2022, prácticamente de cada peso de endeudamiento, 65 centavos se destinaron a inversión en infraestructura y el restante, 35 centavos, al gasto corriente. El 2023 no es la excepción, prácticamente durante todo el sexenio se ha estado destinando una parte creciente del endeudamiento para financiar gasto corriente”.

Y es así que, en términos constitucionales, el endeudamiento se tiene que destinar hacia proyectos o actividades que generen más ingresos esto significa que se utilice en el gasto en inversión.

En este sentido, este es el primer sexenio en donde se incumple con esta “regla de oro”; no obstante, en el sexenio de Enrique Peña Nieto se tuvieron Remanentes de Operación del Banco de México, lo que ayudó a que se cumpliera con dicha regla.

En la práctica nos faltan mecanismos para que pueda ser exigible ese cumplimiento y tiene que ver con la falta de vinculación porque esto va más allá de la deuda, hay una falta de vinculación entre los ingresos y los gastos, no hay transparencia sobre qué ingresos están financiando qué gastos.

Esta es la causa de nuestros apuros financieros.


Economista, Maestro en Finanzas, Consultor de Empresas


México es el país que destina un mayor porcentaje de su gasto público al pago de intereses de la deuda dentro de los países de la OCDE, en 2021 estuvo pagando 14 de cada 100 pesos al servicio de la deuda lo que lo colocó en el primer lugar de la lista, por arriba de países en desarrollo y desarrollados.

Tomemos en cuenta que un país como Japón con una deuda pública mayor al 200% de su Producto Interno Bruto (PIB) más, sin embargo, destina menos recursos a su pago de intereses de la deuda que nosotros. El alto pago de intereses sobre nuestra deuda está presionando cada vez más el presupuesto de egresos federal, lo que representa un costo de oportunidad para otras áreas, como pueden ser salud, educación e inversión pública, seguridad pública, etc.

Algunos ejemplos relevantes de países que se encuentran detrás de México en cuanto al porcentaje de su gasto público a cubrir el pago de la deuda, son: Colombia, con 10.3%; Islandia, con 10.2%; Estados Unidos, con 7.9%; Israel, con 7.2%; y Japón, con 6.2 %. Al cierre del 2023, el costo financiero de México llegó a su nivel más alto en la historia, al absorber recursos por 1.04 billones de pesos, lo que representó 3.3% del PIB, esto como consecuencia de mayores tasas de interés tanto en México como en otros países.

También, el año pasado los recursos que se destinaron al costo financiero representaron 97% de los ingresos petroleros que se obtuvieron durante el año.

Las finanzas públicas del año pasado no respetan la llamada “regla de oro”, que estipula, que el gasto en inversión física sea mayor o igual a la deuda que contrata el gobierno para el año en curso, lo que no se cumple por este gobierno.

Lo que tenemos es que, al cierre del 2022, prácticamente de cada peso de endeudamiento, 65 centavos se destinaron a inversión en infraestructura y el restante, 35 centavos, al gasto corriente. El 2023 no es la excepción, prácticamente durante todo el sexenio se ha estado destinando una parte creciente del endeudamiento para financiar gasto corriente”.

Y es así que, en términos constitucionales, el endeudamiento se tiene que destinar hacia proyectos o actividades que generen más ingresos esto significa que se utilice en el gasto en inversión.

En este sentido, este es el primer sexenio en donde se incumple con esta “regla de oro”; no obstante, en el sexenio de Enrique Peña Nieto se tuvieron Remanentes de Operación del Banco de México, lo que ayudó a que se cumpliera con dicha regla.

En la práctica nos faltan mecanismos para que pueda ser exigible ese cumplimiento y tiene que ver con la falta de vinculación porque esto va más allá de la deuda, hay una falta de vinculación entre los ingresos y los gastos, no hay transparencia sobre qué ingresos están financiando qué gastos.

Esta es la causa de nuestros apuros financieros.


Economista, Maestro en Finanzas, Consultor de Empresas