/ jueves 21 de enero de 2021

#UnRetoMas | Ciudades competitivas

Una buena ciudad es una ciudad competitiva

Según el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), la competitividad es la capacidad de un estado y/o ciudad para generar, atraer y retener talento e inversión.

Desde hace 10 años el IMCO estudia la competitividad de las ciudades mexicanas, bajo el Índice de Competitividad Urbana. Y asegura que uno de los elementos más importantes es la atracción de inversión, que impacta directamente en el desarrollo.

Como en la mayor parte de los casos, si logramos atraer inversión a nuestro estado y nuestras ciudades, estaremos creando un círculo virtuoso que alienta la modernización de los sectores económicos, incentiva una mejor formación de talentos y genera mayor intercambio comercial y diversificación económica, permitiendo que la gente tenga acceso a más empleos y mayor oferta de bienes y servicios.

Todo esto mejoraría la calidad de vida de los chihuahuenses, y lograría generar un ambiente propicio para volver a atraer cada vez más inversiones; generando un círculo virtuoso.

A pesar de que en 2020 México salió del top 25 de los países más atractivos para la Inversión Extranjera Directa, por factores como la cancelación de proyectos como el nuevo aeropuerto de la Ciudad de México y toda la incertidumbre en la gobernanza. En Chihuahua debemos seguir buscando posicionarnos y recuperar la confianza de los inversionistas, nacionales y extranjeros. Pero, como todo, partiendo de planes bien fundamentados que realmente nos ayuden a dar a conocer las bondades de nuestras ciudades ante los ojos del mundo; y creando vínculos estratégicos para plantear proyectos todavía más ambiciosos para el desarrollo, sacando ventaja de nuestra cercanía con Estados Unidos en sectores como el agroindustrial y el turismo.

A pesar de los retos que tiene nuestra tierra por estar en el desierto, como sucedió con temas tan sonados como la defensa del agua, seguimos demostrando ser tierra de valientes, y ahora es cuando tomar los obstáculos del año pasado y arrastrar el lápiz para tener acceso a oportunidades, como la atracción de inversión, con las que realmente podemos crecer como estado y como país.


Una buena ciudad es una ciudad competitiva

Según el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), la competitividad es la capacidad de un estado y/o ciudad para generar, atraer y retener talento e inversión.

Desde hace 10 años el IMCO estudia la competitividad de las ciudades mexicanas, bajo el Índice de Competitividad Urbana. Y asegura que uno de los elementos más importantes es la atracción de inversión, que impacta directamente en el desarrollo.

Como en la mayor parte de los casos, si logramos atraer inversión a nuestro estado y nuestras ciudades, estaremos creando un círculo virtuoso que alienta la modernización de los sectores económicos, incentiva una mejor formación de talentos y genera mayor intercambio comercial y diversificación económica, permitiendo que la gente tenga acceso a más empleos y mayor oferta de bienes y servicios.

Todo esto mejoraría la calidad de vida de los chihuahuenses, y lograría generar un ambiente propicio para volver a atraer cada vez más inversiones; generando un círculo virtuoso.

A pesar de que en 2020 México salió del top 25 de los países más atractivos para la Inversión Extranjera Directa, por factores como la cancelación de proyectos como el nuevo aeropuerto de la Ciudad de México y toda la incertidumbre en la gobernanza. En Chihuahua debemos seguir buscando posicionarnos y recuperar la confianza de los inversionistas, nacionales y extranjeros. Pero, como todo, partiendo de planes bien fundamentados que realmente nos ayuden a dar a conocer las bondades de nuestras ciudades ante los ojos del mundo; y creando vínculos estratégicos para plantear proyectos todavía más ambiciosos para el desarrollo, sacando ventaja de nuestra cercanía con Estados Unidos en sectores como el agroindustrial y el turismo.

A pesar de los retos que tiene nuestra tierra por estar en el desierto, como sucedió con temas tan sonados como la defensa del agua, seguimos demostrando ser tierra de valientes, y ahora es cuando tomar los obstáculos del año pasado y arrastrar el lápiz para tener acceso a oportunidades, como la atracción de inversión, con las que realmente podemos crecer como estado y como país.