El 60 por ciento de los vendedores informales asentados en las inmediaciones del Santuario de Guadalupe permanecen a pesar de que el permiso fue solo por la fiesta guadalupana.
Los empleados de Gobernación Municipal informaron que los puestos que faltan están en proceso de desmantelamiento, pero para esta tarde deberá quedar despejado.
Explicaron que los puestos grandes son los que deberán desinstalarse más tarde debido a que tienen que usar sus unidades para trasladar las estructuras y las cosas.
El 40 por ciento de los puestos chicos ya levantó su vendimia, muchos de los vendedores señalaron que este año las ventas fueron muy bajas.
Los vendedores señalaron que a comparación a otros años la afluencia de personas fue mucho menor y eso dificultó la venta.