/ jueves 25 de noviembre de 2021

#UnRetoMás | El turismo, nuestra oportunidad

Al día de hoy sigo siendo fiel creyente de que es en las crisis dónde surgen las oportunidades. Ahora que los países están avanzando con la vacunación, es momento de, sin bajar la guardia, volver a poner la mirada en sectores significativos que fueron afectados fuertemente por la pandemia.

Como ya lo habíamos analizado en una de estas columnas, el turismo es un fuerte detonador de la economía de nuestros estados y ciudades. Previo 2020, esta industria ha sido motor de crecimiento para muchos países de América Latina contribuyendo, en gran medida, a mejorar la calidad de vida de los ciudadanos siendo considerado incluso como un elemento significativo para erradicar la pobreza; ya que, al abarcar varios rubros, es una fuente de ingresos de la que se benefician muchas de nuestras familias.

Sin embargo, la contribución económica no es el único beneficio que nos trae el turismo. Otra de sus atribuciones es la creación o fortalecimiento de nuestra identidad. Desde la identidad nacional, lo que nos identifica como mexicanos, hasta la identidad local lo que nos identifica (en mi caso como Chihuahuenses y Deliciences), el turismo nos da la oportunidad de conocer nuestras tradiciones culturales, nuestros productos y servicios para poder ofrecerlos a otros.


Alrededor del mundo, el turismo sigue sido uno de los sectores más afectados tras la crisis sanitaria del Covid-19. Es tiempo de poner especial atención en las acciones que llevamos para incentivar su recuperación.

Un ejemplo de estas acciones es la reciente edición del “Tianguis Turístico México”, celebrará del 16 al 19 de noviembre por primera vez en Mérida, Yucatán, cuna de la cultura Maya. Este evento, ahora itinerante, se lleva a cabo desde 1975, y se considera la feria de turismo más grande de México y América Latina. Más de 600 expositores, 900 empresas y 40 mil prestadores de servicios entre ellos de cadenas hoteleras, aerolíneas, representantes turísticos de los 32 Estados de la República, agentes de viaje, asociaciones turísticas y organizadores de eventos se reúnen bajo un mismo techo, para que México y la ciudad cede den a conocer tradiciones, paisajes, artesanías, comida y sobre todo, la calidez de sus habitantes.


Aunque para esta edición, el gobernador de Yucatán, Mauricio Vila Dosal, mencionó que el Tianguis de Mérida "es el más organizado de la historia, pues se planeó y organizó a lo largo de al menos dos años”. Es merecido decir que Yucatán ya era líder en bioseguridad y ha seguido capacitando continuamente a esta industria y eso se nota. En este evento pudimos darnos cuenta no sólo del trabajo que hay detrás, sino también del gran compromiso que tienen el alcalde de Mérida Renán Alberto Barrera y el Gobernador de aquel bello Estado Mauricio Vila por recuperar este sector que tanto nos beneficia a todos los mexicanos.

Conocer el éxito de este tipo de eventos nos empuja a hacer algo desde nuestras propias trincheras. En Delicias, por ejemplo, tenemos gran capacidad para generar proyectos y atracciones que permitan que la gente de nuestro mismo estado venga.

En lo que a mi toca, es tiempo de ponernos a trabajar en el turismo de nuestro propio estado y nuestra región.


Al día de hoy sigo siendo fiel creyente de que es en las crisis dónde surgen las oportunidades. Ahora que los países están avanzando con la vacunación, es momento de, sin bajar la guardia, volver a poner la mirada en sectores significativos que fueron afectados fuertemente por la pandemia.

Como ya lo habíamos analizado en una de estas columnas, el turismo es un fuerte detonador de la economía de nuestros estados y ciudades. Previo 2020, esta industria ha sido motor de crecimiento para muchos países de América Latina contribuyendo, en gran medida, a mejorar la calidad de vida de los ciudadanos siendo considerado incluso como un elemento significativo para erradicar la pobreza; ya que, al abarcar varios rubros, es una fuente de ingresos de la que se benefician muchas de nuestras familias.

Sin embargo, la contribución económica no es el único beneficio que nos trae el turismo. Otra de sus atribuciones es la creación o fortalecimiento de nuestra identidad. Desde la identidad nacional, lo que nos identifica como mexicanos, hasta la identidad local lo que nos identifica (en mi caso como Chihuahuenses y Deliciences), el turismo nos da la oportunidad de conocer nuestras tradiciones culturales, nuestros productos y servicios para poder ofrecerlos a otros.


Alrededor del mundo, el turismo sigue sido uno de los sectores más afectados tras la crisis sanitaria del Covid-19. Es tiempo de poner especial atención en las acciones que llevamos para incentivar su recuperación.

Un ejemplo de estas acciones es la reciente edición del “Tianguis Turístico México”, celebrará del 16 al 19 de noviembre por primera vez en Mérida, Yucatán, cuna de la cultura Maya. Este evento, ahora itinerante, se lleva a cabo desde 1975, y se considera la feria de turismo más grande de México y América Latina. Más de 600 expositores, 900 empresas y 40 mil prestadores de servicios entre ellos de cadenas hoteleras, aerolíneas, representantes turísticos de los 32 Estados de la República, agentes de viaje, asociaciones turísticas y organizadores de eventos se reúnen bajo un mismo techo, para que México y la ciudad cede den a conocer tradiciones, paisajes, artesanías, comida y sobre todo, la calidez de sus habitantes.


Aunque para esta edición, el gobernador de Yucatán, Mauricio Vila Dosal, mencionó que el Tianguis de Mérida "es el más organizado de la historia, pues se planeó y organizó a lo largo de al menos dos años”. Es merecido decir que Yucatán ya era líder en bioseguridad y ha seguido capacitando continuamente a esta industria y eso se nota. En este evento pudimos darnos cuenta no sólo del trabajo que hay detrás, sino también del gran compromiso que tienen el alcalde de Mérida Renán Alberto Barrera y el Gobernador de aquel bello Estado Mauricio Vila por recuperar este sector que tanto nos beneficia a todos los mexicanos.

Conocer el éxito de este tipo de eventos nos empuja a hacer algo desde nuestras propias trincheras. En Delicias, por ejemplo, tenemos gran capacidad para generar proyectos y atracciones que permitan que la gente de nuestro mismo estado venga.

En lo que a mi toca, es tiempo de ponernos a trabajar en el turismo de nuestro propio estado y nuestra región.